Taxi (3era parte) by Elena

Capitulo Anterior: http://actosdefeylibertad.blogspot.com.ar/2014/01/taxi-2da-parte-by-elena.html

*******

-          Desde cuando revisas mi celular? – sorprende a Camila al llegar de la Facultad, es tarde, está cansado, agotado y se demoro en un bar. Hace días que no duerme bien, tiene sueños que ni él se explica.

-          Un tal Guillermo te estuvo llamando

-          Atendiste?

-          No, quién es?

-          Un colega

-          Y estas fotos? Y este nene? De un colega también?

-          En realidad s….

-          No me tomes por idiota Pedro, estas con alguien más?

-          No

-          Lo único que me falta es enterarme que tenés un hijo por ahí

-          No digas estupideces

-          Estupideces!!! No me llamas, hiciste un papelón en la cena con mi papá, de coger ni hablemos, ya me olvide. Decime que pasa, en qué andás o con quién?

-          Con nadie

-          Te enamoraste de otra mujer? Decímelo, decime quién es, cómo se llama, es la mamá de este nene?

-          Me estas preguntando cosas que ni yo sé

-          De quién es este pañuelo? Tiene el mismo perfume que el del otro día, es de un colega también?

Le saca las cosas de la mano, súbitamente enojado – Basta! – grita- cuantas veces te tengo que decir que no revises mis cosas! Ándate!

-          Me voy y no me ves mas

La mira desafiante – Mejor

El cachetazo le da vuelta la cara y le deja ardiendo la mejilla, se desploma en una silla, las palabras de Camila resuenan en su cabeza “en que andas?” “con quien?” “ te enamoraste?” “estas con alguien?” “TE ENAMORASTE?”

Huele el pañuelo, sabe la respuesta, “del dueño de este perfume”....

Suena el teléfono

-          Pedro? Qué pasa? Te estuve llamando

-          Nada, recién llego – miente

-          Estas bien? Habíamos quedado en hablar del trabajo ese….

-          Hoy no, no me siento bien – arrastra las palabras

-          Que paso?

-          Discutí con Camila

-          Estas borracho?

-          No…. Un poco

-          Dame la dirección que voy para allá

-          No hace falta

-          Dame la dirección

---------------------

-          Estas completamente borracho- Suben en el ascensor, el perfume de Guillermo invade el recinto y lo marea, o tal vez sea el movimiento o el alcohol, se le aflojan las piernas. Pasa un brazo por debajo de los de Pedro y lo sostiene, lo ayuda a entrar al departamento.

-          Voy a vomitar

-          Aguanta que lleguemos al baño

-          No

En una rápida maniobra le inclina la cabeza – sos un desastre – lo incorpora, le limpia la cara y la boca con su pañuelo, mientras lo besa “Tiene que gustarme mucho para hacer….lo que estoy haciendo” .Para su sorpresa Pedro responde, es su lengua la que está en su boca. Lo separa un poco – Vamos al baño – abre la ducha y lo mete adentro con ropa y todo – báñate y cámbiate, te preparo un café.

Al rato aparece por la cocina, pantalón pijama, el torso desnudo “Así no voy a poder”

-          Perdón

-          Por la borrachera, el vomito o el beso? – le alcanza una taza de café, tres cucharadas de azúcar

-          Se me parte la cabeza

-          Toma eso y acóstate, después hablamos

-          Cuál es?

-          Qué cosa?

-          Tu perfume

-          La Nuit de Laurent

-          Me gusta

Le da un beso en la cabeza y deja el pañuelo sobre la mesa – Me debes dos

------------------------

Dos días después llega al estudio un cadete con un sobre para Graziani, adentro un pañuelo prolijamente doblado. Sonríe y envía un mensaje “y el otro?” “si me invitas a cenar” “te busco a las nueve” “es una cita?” “boludo”

En el restaurant Pedro compra una rosa

-          No vayas a hacer cursilerías

-          Que amargo Graziani – corta el tallo justo debajo del cáliz, lo envuelve en el pañuelo y lo guarda en el saco de Guillermo.

-          Tenés algo que escriba en esta tela?

Rebusca en los bolsillos, siempre le queda algún marcador encima

-          Gracias profesor – escribe en una de las servilletas – la lees después – y la guarda en el saco de Pedro

“Basta mirarte para saber que con vos me voy a empapar el alma”

**********

Estaciona a la vuelta del estudio, lleva los trabajos de los alumnos para corregir y una reserva para esta noche. Pasa por la puerta del bar y entonces lo ve, sentado en una mesa con un joven rubio de impecable traje gris. Se esconde detrás de una columna. Hablan, las manos del muchacho están entre las de Guillermo, le acaricia la cara, se levanta y lo besa en la boca antes de salir. Se recuesta mareado contra la pared, tiene que marcharse antes de que lo vea, camina tambaleante hasta el auto, vomita en la vereda y sube, enciende el aire acondicionado y la radio al máximo.

-------

Hace una semana que lo llama y no contesta, ya ni sabe cuántos mensajes le dejo – "pendejo del orto" – entra a la web de la facultad y averigua los horarios de sus clases. Se dirige al estacionamiento, ubica el corsa azul y espera atrás de una columna hasta que escucha que desactiva la alarma y, sin darle tiempo, abre la puerta del acompañante.

-           Que haces?

-           Hace una semana que te estoy llamando – silencio – quedamos en corregir los trabajos de tus alumnos

-           Te los mando mañana con un cadete, bájate

Sorprendido – No seas pendejo, los tenés acá?

-           No

-           Qué pasa?

-           Nada, bájate – sin encender el auto

-           Si están en tu casa vamos – abrocha el cinturón de seguridad

Arranca en silencio

-           Me vas a decir?

-           No me dijiste que estabas con alguien

-           No estoy con nadie

-           Te vi

-           Que viste?

-           En el bar con un tipo

Sonríe

-           No le encuentro la gracia

-           Es un amigo o ex amigo en realidad

-           No parecía

-           Bueno….un ex amigo con derechos

-           Como se llama?

-           Matías

-           Y?

-           Y le estaba explicando que no podía estar más con él porque estoy empezando una relación en serio con cierto profesor de ojos marrones y una sonrisa que embruja – apoya la mano en el muslo de Pedro que sorprendido lo mira sonrojado – y que suele robarme los pañuelos

Golpe y ruido de vidrios rotos

-           La puta madre es nuevo

-           Sos ciego, boludo o qué? – el conductor del auto de adelante

-           Perdón

-           Espero que tengas un buen seguro

Verifica los daños y busca los papeles – No sé de qué te reís, estás bien?

-           Si

Intercambia datos con el damnificado y sube – La puta madre

-           Cálmate

-           No me toques

Dejan el auto en la cochera y caminan juntos, Guillermo lo abraza por los hombros. Suben en el ascensor, Pedro lo acorrala contra la pared y hunde su boca en la de él, sigue por su cuello y desprende los primeros botones de su camisa. Intenta abrir la puerta del departamento pero con el cuerpo de Guillermo enteramente apoyado contra él se le hace difícil – Me vas a tener que pagar el arreglo

-           Te estás aprovechando de mi -  le besa la nuca, la espalda, las manos lo recorren por debajo de la camisa

-           Me parece lo contrario

Casi caen cuando finalmente Pedro logra abrir. Guillermo cierra la puerta con el pie y lo arrastra hacia la habitación, sacos, camisas, zapatos, medias, pantalones quedan por el camino. Los instintos mandan, sus manos descubren, la piel guía, los gemidos confirman, cada parte de sus cuerpos reclama, acepta, exige, se entrega.

Adormilado se gira en la cama y extiende la mano, no está, hunde la cabeza en la almohada que aún conserva el perfume y entonces huele el café y se despierta. Llueve.

-           Buen día – lo besa, la notebook encendida

-           Café?

-           Leche con cereales – sonríe

-           Ok – tira el café en la pileta y busca en la heladera – vestite, tenés clase en una hora y media

-           Me estuviste investigando?

-           Nah, déjame los papeles del auto que le digo a Marcos que se ocupe del seguro.

Salen – Paraguas? No claro, no tenés. Buscas un taxi? – pide y espera debajo de un balcón. Indica la dirección del estudio – y después a la facultad de abogacía- le seca la cara y el pelo con un pañuelo que guarda en el bolsillo de Pedro.

-           Creo que es la primera vez que voy a llegar temprano

Abre la puerta del auto

-           Espera – lo retiene de la muñeca, lo atrae hacia él y lo besa leve en los labios

-           No tardes en devolverme ese pañuelo

Continuará….