Este
lunes Guille está distraído pero no por preocupación, los momentos vividos con
Pedro lo han mantenido insomne y feliz.
Vuelve
una y otra vez a Pilar, a la piel y al perfume de Pedro después del amor.
No
soporta la rutina que lo separa de él, no sabe si va a aguantar hasta la clase
del jueves sin verlo.
El
celular mantiene el contacto pero no reemplaza su piel, la caricia, el contacto
piel con piel que de sólo recordarlo le genera un deseo incontenible de ir a
buscarlo, secuestrarlo, llevárselo con él y amarlo hasta el delirio o hasta
morir el uno en brazos del otro.
Pero
debe volver al estudio.
Entra y
encuentra a Cuca ordenando unos papeles, le da ternura mirarla intentando poner
orden en ese caos que a la vez ella misma ha generado.
-A ver
nene? – le dice tomándole la cara con la mano – qué lindo que estás hoy. Estás
como más joven. Ay tus ojos! Mirá cómo brillan! … qué pasó? … me vas a contar a
mí? …
“Si
supieras” piensa Guille “en cinco
minutos se enteraría todo Buenos Aires”.
Sonríe.
Le da un beso.
-Vos
porque me querés … por eso me ves así, pero soy el mismo hincha pelotas de
siempre-
-No,
vos podés engañar a todos pero no a mí que te conozco desde que naciste-
-Traeme
café … - la interrumpe – bien cargado, necesito des per tar me.
Va
hasta su despacho, allí está Marcos que está buscando unas carpetas.
-Buenos
días Marcos – dice palmeando su espalda – todo en orden?
-No …
sí … bah -
Guille
se sienta y Marcos deja las carpetas en el escritorio, apoya los brazos y lo
mira.
-Qué …
qué pasa? – sin prestarle demasiada atención.
-Bueno ¿te acordás de lo que hablamos? … bueno, me
ocupé del tema-
-Del
tema? qué tema? – ahora sí le presta atención
-De los
currículum , las entrevistas, incorporar a otro abogado … ¿no te acordás? –
-Ah sí
… y? qué pasa?-
-Bueno,
que me ocupé y ya lo seleccioné, tiene treinta y cinco años y hace ocho que
ejerce la profesión. Estaba trabajando en un estudio de una familia de abogados
pero viste cómo es, el tipo tiene pocas posibilidades de ser algo más que un
empleado.
-Y
piensa que acá va a hacer carrera?, en este estudio estamos vos y yo Marcos y
quedamos que no va a entrar como socio, acá también va a ser empleado …-
-Lo tiene
claro … lo tiene claro, pero es inteligente y rápido yo creo que -
-Cómo
se llama? – con indiferencia
-Guille
… Marcos – interrumpe Cuca – hay un joven que los quiere ver
Cuca
deja el café en el escritorio.
-Quién
es Cuca? – pregunta Guille
-Gustavo
Robles …-se escucha una voz
Un
hombre joven está parado en la puerta y mira a Guille con mirada irónica.
Al
verlo Guille como movido por un resorte se incorpora.
-Ah!,
pasá Gustavo, justo le estaba comentando a mi socio de vos … Guillermo Graziani
… Gustavo Robles, el abogado del que te estaba hablando - los presenta Marcos
Cuca se
va.
El
abogado se adelanta y le tiende la mano a Guille que lo mira serio,
descolocado.
-Pasá
Gustavo - dice Marcos – viniste temprano viejo - sonríe – esperame unos minutos,
termino un asunto que estaba resolviendo y ya estoy con vos, mientras te dejo
un rato con mi socio para que se vayan conociendo ¿trajiste tu documento? Así
voy armando la documentación–
-Sí – y
se lo extiende
-Perfecto.
Guille, hago un par de llamadas y vengo - dice yéndose – tomá asiento Gustavo.
Marcos
se retira.
-Qué
chico es el mundo ¿no Graziani? – sonríe con familiaridad Gustavo.
-Qué
mierda hacés acá? – la voz de Guille se transforma al igual que su rostro
mientras va hacia la puerta y la cierra. Vuelve y se para frente al abogado.
-No te
pone contento verme después de tanto tiempo? –
Guille
suspira tratando de contenerse – Qué carajo estás haciendo acá?-
-Escuché
que en este estudio necesitaban otro abogado, presenté mi currículum, tu socio
me entrevistó, a propósito, buena onda tu socio … y bueno, como te decía, él me
seleccionó y acá estoy-
-Vos pensás
que soy un pelotudo ¿no?, bueno querido no … no soy un pelotudo, sé muy bien que
no estás acá por el trabajo, por la sencilla razón de que no trabajaste en toda
tu puta vida … ¿qué hiciste? ¿inventaste referencias?¿le pediste a tu “papito”
de turno?, perdón… ¿él sabe que estás acá? -
Gustavo
apoya sus brazos en el escritorio –Y tu socio? sabe? … digo … sabe lo tuyo? –
sonríe ante la mirada furiosa de Guille – no, tu cara me lo dice todo, no sabe
nada, sería interesante si se entera … él, tus clientes y esa dulce mujer que
prepara el café-
Guille
lo agarra del brazo y lo lleva hacia la puerta.
-Eh eh
eh! – dice Gustavo logrando zafarse – no Graziani. ¿Querés que todos se enteren
acá que el intachable Graziani tiene una doble vida?, incluso hasta me he
enterado de que ahora también sos profesor … no no, me parece que al decano
tampoco le gustaría enterarse de algunos detalles … ¿escabrosos? –
-Qué
mierda querés? … decí qué querés y andate-
-Tranquilo
… tranquilo … no es tan fácil - acerca su mano al rostro de Guille que lo
aparta con brusquedad - me quedé caliente con vos Graziani … muy, siempre me
acuerdo de aquellas reuniones en el estudio, cuando nos quedábamos hasta tarde,
¿te olvidaste de eso? – suspira – estabas hermoso … y ahora estás más hermoso
todavía.
-Claro
que me acuerdo … ¡claro que me acuerdo! … me acuerdo que me enteré después de
que vos te estabas encamando con el viejo Ludueña, el dueño del estudio y que
nos usaste a él y a mí para pasarle la información del caso al abogado del hijo
de puta de Toranzo, que con eso pudo armar una defensa que lo sacó de la cárcel
donde debería haber purgado perpetua … el que no tiene memoria sos vos … así
que te vas ya mismo hijo de puta … no quiero volver a verte nunca más por acá -
Gustavo
lo mira desafiante – No querrás que tu socio y tus clientes se enteren ¿no?, no
te conviene, porque no pensarás que me voy a ir así de fácil, necesito el
laburo Graziani … no está fácil conseguir entrar a un estudio como antes-
-Andá …
andá … ya vas a conseguir algún otro incauto, acá no te quedás, no vas a convertir
mi estudio en un quilombo, yo no lo voy a permitir, me respeto demasiado para
eso-
-Si me
echás eso va a tener consecuencias Graziani –
-Me
importa tres carajos … hablá todo lo que quieras … yo también voy a tener cosas
para decir sobre vos para que no haya ningún estudio de abogados en todo el
país que quiera contratarte y sabés que lo voy a hacer … no jodas conmigo hijo
de puta … no me jodas y andate … andate andate andate -
Le abre
la puerta y lo lleva del brazo hasta la puerta de la calle.
-Te vas
a arrepentir Graziani! -escucha que grita
Pero
Guille cierra la puerta.
En eso aparece
Marcos con el documento de Gustavo en la mano, Guille se lo arrebata, abre la
puerta, se lo tira y cierra de nuevo.
-Qué
carajos pasó? – pregunta Marcos que no puede salir del asombro.
-Ese
tipo Marcos! … ese tipo es un reverendo hijo de puta! y yo no quiero a ese
miserable en nuestro estudio, la próxima vez antes de contratar a alguien me
consultás ¿me oíste? -
-De qué
mierda estás hablando? vos … vos me autorizaste a tomar a quien a mi me
pareciera o te olvidaste? -
-No sé
… cambié de opinión, desconfío de tu instinto, antes de que elijas al próximo quiero saber hasta la marca del café
que toma, ¿estamos?. No quiero otra sorpresa como esta Marcos … no quiero!
Vuelve
a su despacho y cierra la puerta antes de que su socio atine a reaccionar.
Lo
inesperado de la situación lo ha superado. Gustavo es un muy mal tipo, un
miserable, no entiende cómo en algún momento pudo sentirse atraído por él. “La
soledad altera los reflejos” piensa.
Siente
que la vida lo está cercando. Sabe que lo que sucedió hoy no va a quedar así.
Un escalofrío lo recorre, mejor no seguir pensando, ocurra lo que ocurra él no
va a poder evitarlo … no esta vez.
------------------------------------------------------------------------
Ya es
tarde cuando llega a su departamento, estos últimos meses su carrera ha entrado
en la vorágine de las últimas cursadas y los finales.
Deja la
mochila, deposita los apuntes en la mesa, está agotado, entre el trabajo y la
cursada, los martes son de los peores días de la semana. Encima tiene que
preparar un práctico para mañana que le va a ocupar parte del sueño, así que a
preparar jarras enteras de café.
Está
acostumbrado a ese ritmo, sólo que hay un problema, su grado de concentración
está en su nivel más bajo. Su cabeza aún no hizo el viaje de regreso desde
Pilar. Guille ocupa gran parte de sus pensamientos. Dos días hace que no lo ve
y ya le resulta insoportable no saber de él, no escuchar su voz. Se ha obligado
a no llevar su celular con él porque sabe que terminará llamándolo y no quiere.
Sin embargo no bien llega revisa para ver si hay alguna llamada perdida. No.
Guille tampoco llamó. “Te pasará lo mismo que a mí… que pienso todo, todo el
día en vos?” suspira.
Se
prepara un sandwich y un café, acerca los apuntes y comienza a leer, pero tiene
que volver varias veces sobre los mismos párrafos. Es inútil, decide dejarlo un
rato. Se da una ducha y se está cambiando cuando escucha el celular.
-Hola …
- no puede ocultar la ansiedad en la voz
-¿Mi amor?
- escucha su voz y el corazón se acelera
Se
sienta, suspira, sonríe feliz.
-Hola
mi amor, qué bueno escucharte - cierra
los ojos y se deja caer en la cama
-Qué
hacías? - preguntas cotidianas
Cierra
los ojos -Traté de estudiar pero leía un renglón y … Graziani, leía otro
renglón y … Graziani … tengo abstinencia de Graziani … ¿qué me aconsejás? -
-No soy
el indicado para aconsejarte, estoy hecho un desastre … yo también tengo
abstinencia de vos precioso - suspira
Guille –
-¿Dónde
estás? –
-Acá,
en el estudio todavía, terminé recién de armar un caso … gracias a que Marcos
me ayudó porque yo tengo la cabeza quemada -
-Envidio
a Marcos -
-Por? –
sonríe Guille
-Puede
verte todos los días, llamarte sin inventar excusas. Charlar con vos, desayunar
con vos, trabajar con vos … lo odio -
-Pobre
Marcos … al pobre le gustan las mujeres más que comer pollo con las manos … y lo tienen loco -
Pedro
sonríe.
-Igual
lo odio y a la mujer de voz chillona también-
-Cuca -
se ríe Guille
-Se
llama Cuca? … bueno, ya no la odio tanto pobre - suspira - qué no daría yo por ir
a tu estudio todos los días, estaría allí a primera hora esperándote sólo para
verte, escucharte , olerte – dice intenso
-Y yo
no podría trabajar precioso, estaría todo el día mirándote … o mejor, te
encerraría en mi despacho y no te dejaría salir –
-Suena prometedor
Graziani, te tomo la palabra … ¿estás solo? –
-Sí, me
estaba por ir, pero miré el celular y no aguanté más - suspira Guille
aflojándose la corbata – quería escucharte … te extraño precioso … te extraño
tanto - cierra los ojos
-Esto
me está matando Guille, nunca me había pasado algo así, te sueño, te pienso
todo el día, no puedo estudiar, sólo tengo ganas de vos ¿entendés?, y más te
veo más ganas de vos tengo. No sé cómo voy a hacer hasta el jueves… y el jueves
no sé cómo voy a hacer para quedarme sentado cuando te vea entrar…¡por Dios! …
me estoy volviendo loco y lo más increíble es que nunca me sentí tan feliz …
nunca en mi vida- dice y se le quiebra la voz - ¿entendés que me hacés feliz? ¿entendés
eso? … ¿Guille? … ¿estás ahí? -
Guille
siente un nudo en la garganta y tiene los ojos húmedos.
-Si
Pedro, claro que te entiendo, porque a mí me pasa lo mismo cielito -
-¿Y qué
vamos a hacer con esto?¿qué vamos a hacer? –
Guille
suspira y pasa su mano por sus ojos – No sé…no sé mi amor … no sé. En este
momento no sé nada, estoy enamorado de vos hasta los huesos … eso es lo único
que sé, es mi única certeza y aunque no lo creas, a mi también es la primera
vez que me pasa, no tengo cabeza para pensar ni sentir otra cosa … perdoname, sé
que esperás más de mí, pero esto es lo que tengo ahora … perdón-
Pedro
sonríe enamorado – Está bien, con lo que me dijiste recién puedo tirar unos
días, aunque tenga que verte una vez por semana -
-Bueno
… de eso hablamos después-
-Hablamos
de qué? cuándo? - abre los ojos curioso
-Mmm …
no seas ansioso, el jueves te digo -
Resignado
– Bueno … hasta el jueves entonces - suspira y cierra los ojos – te amo
-Yo
también … yo también te amo precioso -
Guille
acaricia el celular y lo apaga. El despacho está a oscuras, se reclina para
atrás en el sillón, cierra los ojos y allí está Pedro … siempre Pedro, atravesado
en su alma.
-Buenos
tardes – entra Guille al aula, trata de no mirar a Pedro pero no puede escapar
de su mago de ojos grandes. Pedro y su taquicardia van juntos cuando lo ve.
Logra
desviar la mirada y sin dilaciones comienza la clase. Comenta brevemente que ya
sólo quedan dos meses de cursada por lo cual hay temas que ya tienen que ir
cerrando. Les recuerda que si tienen dificultades él va a seguir estando los
sábados por la mañana para las consultas, al menos hasta que terminen las
clases. Sabe que están atorados con las otras materias y lo lamenta pero para
poder aprobar su cátedra deberán tener los trabajos prácticos aprobados sí o sí
eso al menos si desean promocionarla. El resto deberá rendir final.
Luego
de darles la bibliografía para el siguiente práctico les pasa un audiovisual
sobre un caso que tuvo mucho impacto en la opinión pública y el análisis que desde
ópticas diferentes hicieron jueces y fiscales que tuvieron que ver en la investigación. El resto de la
clase trabajan sobre lo visto.
Pedro
participa pero a medias, ama escucharlo, está pendiente de sus respuestas, de
sus observaciones y Guille intenta que la mirada de Pedro no lo condicione y
logra dar una clase relativamente sin sobresaltos, salvo en las ocasiones en
que mirando a Pedro no puede evitar vacilar y olvidarse de lo que estaba
diciendo.
Termina
la clase y Pedro finge revisar sus apuntes mientras sus compañeros se retiran.
Quedan
solos.
Pedro
cruza los brazos y lo mira de arriba abajo impertinente.
-Me
quedé porque necesito hacerle una observación sobre su clase de hoy-
Guille
le sigue el juego.
-Sí,
dígame … lo escucho - sigue acomodando las cosas en el maletín sin mirarlo.
-No
pude concentrarme en la clase por su culpa, sus ojos no me dejaron y su boca es
una distracción inevitable, sólo pensé en besarla desde que entró por esa
puerta-
Guille
lo mira y le responde serio – Me parece Beggio que usted habla mucho pero se
queda ahí sentado sin hacer nada –
Pedro
se para y se le aproxima. Guille a propósito toma un papel del maletín y hace
que lee. Pedro mira que no haya nadie en la puerta y se ubica muy próximo a
Guille.
-Le
parece que hablo mucho? Conozco una forma en que usted puede hacerme callar -
Graziani
mira hacia la puerta.
-Ah sí?-
lo mira serio y de pronto toma el rostro de Pedro y lo besa apasionadamente.
Pedro queda felizmente aturdido.
Guille
saca un papel de su maletín y se lo da.
-Me
alegra que le haya gustado la clase Beggio, porque espero verlo pronto - acto seguido
toma el maletín y se va -
Pedro
no entiende nada, hasta que mira el papel y su rostro se ilumina.
---------------------------------------------------------------------
Guille
abre la puerta y Pedro se zambulle en sus brazos. Se besan hambrientos, cada
beso más delicioso que el anterior. La ropa vuela como ellos juntos mientras el
amor los hace de nuevo y son manos, bocas, piel, deseo hasta ahogarse, hasta el
salto final, hasta fundirse y estar de nuevo completos.
Guille
le aparta el cabello que se arremolina en desorden sobre sus ojos. Pedro lo
deja hacer apoyado en su pecho, mientras lo mira y sonríe … no lo puede evitar,
cuando está con él no le falta nada, no necesita nada, sólo que lo mire con
esos ojos que le quitan la respiración.
--Pedro
… mi amor … tenemos que hablar. Estuve pensando sabés en nuestra conversación
del otro día.
-Qué
pasa? – se inquieta
-Que
quiero que hagamos bien las cosas. Yo no quiero cagarte los estudios Pedro,
estás en el último año de la carrera, es importante que pongas tu cabeza ahí y
siento que yo con mi necesidad de vos no te lo estoy permitiendo, me estoy
interponiendo ¿entendés? –
-No ...
no es así - Pedro lo besa – no es así. Vos no tenés la culpa si te pienso todo
el día.
-Esperá,
Pedro…esperá. Lo que quiero decir es que tenemos que hacer el esfuerzo de
frenar un poco. Vos tenés que recibirte ¿no es cierto? … bueno, yo quiero que
lo hagas, que te sientas tranquilo y para eso es necesario que tomemos un poco
de distancia.
-Distancia?
Qué carajo estás diciendo? – Pedro se aparta, se sienta en la cama y lo mira
dolido.
-Pedro,
no estoy hablando de separarnos – trata de calmarlo – lo que estoy planteando
es que espaciemos los encuentros para que vos puedas concentrarte en tu
carrera, te queda un poco más de dos meses para recibirte, no podés tirar todo,
yo no me lo perdonaría Pedro y con el tiempo tampoco vos.
-Pero
es que yo no puedo ni pensar en no verte ¿entendés? – se inclina y hunde
su boca en la de él – no puedo estar sin
esto, ya no puedo.
-Y vos
pensás que yo sí? - le dice tomando su rostro entre sus manos – de verdad
pensás que va a ser fácil para mí no verte?... yo me estoy muriendo cuando te
digo esto Pedro, si me guiara por lo que siento te encierro acá conmigo y no te
dejo ir más, pero en este momento me toca a mí ser el que tenga la cabeza fría.
-No
puedo - lo mira suplicante
-Vas a
poder y yo también voy a poder. Escuchame precioso, tomémoslo como una prueba pero yo voy a estar Pedro… yo voy a estar, si
un día no podemos con las ganas de vernos nos llamamos, igual nos vamos a ver
en clase, pero sólo eso Pedro, por un tiempo sólo eso ¿me entendés cielito?
-No me
alcanza Guille … no me va a alcanzar -
-Pedro ¿te
acordás cuando me dijiste que no te trate como si fueras un pendejo? bueno …
sos un hombre Pedro, un hombre al que amo más que a mi vida, por eso … vas a
terminar la carrera, te vas a recibir y yo por otro lado, también voy a
necesitar tiempo. Tengo que ordenar un poco el quilombo de mi vida, hay cosas
que no pueden seguir.
-Qué
cosas? –
-Cosas
que durante años soporté, que me hicieron muy infeliz y que también hicieron
sufrir a otros y eso se tiene que terminar. Y vos tenés que ver con esta
decisión, sino hubieras aparecido yo hubiera seguido dormido tal vez por el
resto de mi vida. Pero eso tiene que cambiar… va a cambiar ¿Entendés?
Pedro
se sienta en la cama de espaldas a él
-Es
mucho tiempo … mucho tiempo - pero sabe que Guille tiene razón, pero eso no le ahorra
el dolor que siente.
Guille
acaricia su espalda, le besa los hombros, el cuello. Se siente desgarrado por
dentro.
-Vamos
a poder Pedro … si lo nuestro es amor va a resistir esto y mucho más -
Guille
pasa los brazos por su cintura y lo abraza, siente que Pedro va cediendo.
-Veni
precioso, no perdamos el tiempo -
Pedro
se da vuelta y responde a sus caricias, se desliza sobre él, lo besa profundo,
quiere que el sabor de la boca, del cuerpo de Guille le alcance hasta la
próxima vez que puedan estar de nuevo así.
-Te voy
a dejar piel y huesos Graziani- le susurra al oído, mientras comienza a amarlo
lenta, desesperadamente.
“Tiene
que resistir, no puede no resistir” piensa Guille y un miedo nuevo le recorre
el cuerpo. Pero de inmediato se olvida, Pedro lo invade, lo toma, lo reclama,
lo hace suyo y él se deja llevar, se entrega sin reservas, por completo.
----------------------------------------------------------
Es
viernes y el fin de semana pinta que va a ser una verdadera tortura. No puede
verlo, no puede llamarlo, ese es el acuerdo pero Pedro no sabe si va a poder
lidiar con eso.
Está
trabajando pero su pensamiento está lejos, debido a eso ha cometido varios
errores el día de hoy que han provocado algunos enojos.
-Disculpá
… disculpá -
Se da vuelta.
-Sí ¿qué
necesitás? -
-Me
podrás sacar una copia de los cinco primeros capítulos de este libro? – un
hombre joven.
Pedro
piensa que es la primera vez que lo ve, igual la facultad es grande.
-Tenés mucho
apuro? ¿para cuándo lo necesitás? –
-Las
podrás sacar ahora? Tendría que devolver el libro-
-Si, no
hay problema, en este momento está tranquilo así que ya las saco –
-Te
jode si espero? –
-No, para
nada -
Comienza
a sacar las copias.
-Vos
también estudiás? – pregunta el hombre
-Sí -
se da vuelta – este año termino
-Felicitaciones,
vamos a ser colegas -
-Sos
abogado? – no tiene muchas ganas de conversar pero al menos por unos minutos va
a pensar en otra cosa.
-Sí,
trabajo en un estudio, me voy haciendo lugar de a poco, viste cómo es … a veces
los colegas no te la hacen fácil, tenés que pagar derecho de piso-
-Si,
claro – responde Pedro sin mucho interés.
-Y ¿qué
tal tus profesores? – distraído
-Bien …
bah … algunos mejor que otros – “en especial uno” piensa.
-Decime
los apellidos, seguro que alguno fue profesor mío -
Pedro,
un poco aburrido ya, le va diciendo los nombres de los docentes.
-Y en
una materia optativa tengo a Guillermo Graziani – espera que el otro no se haya
dado cuenta del temblor en su voz al pronunciar el nombre de Guille.
-Graziani?
– súbitamente interesado – mirá vos – se queda en silencio y aparta la vista.
Pedro
se da cuenta de que algo pasa.
-Lo
conocés? –
-Si, trabajé
un tiempo en su estudio – otra vez el silencio
Pedro
se impacienta pero trata de disimularlo.
-Es un
profesor excelente, me imagino que debe ser además un gran abogado –
-No …
sí … como profesional no hay nada que decir…- la frase inconclusa queda
flotando.
-Qué
querés decir? – Pedro siente una fea sensación en la boca del estómago.
-Lo que
te digo, como profesional es bárbaro … pero - lo mira – perdoname no me gusta
el puterío - confidente – lo que pasa es que el tipo tiene su fama ¿viste? –
Pedro
siente el calor subir por su cara – ¿Fama? –
El
hombre mira hacia los lados para ver que nadie lo escuche.
-Cuando
entré me habían dicho que bueno … en fin … que a Graziani le gustaban los tipos,
hasta ahí todo bien, yo no soy prejuicioso, cada uno hace su vida – Pedro se
siente descompuesto – pero también había escuchado que a dos que habían estado
antes que yo los había avanzado, por decirlo prolijo, los flacos no quisieron …
Graziani insistió … y al final se tuvieron que ir. En fin, yo no lo creí hasta
que me pasó – Pedro tiene que hacer un gran esfuerzo para seguir escuchándolo -un
día que nos quedamos trabajando hasta tarde comenzó a acercarse, a intentar
tocarme, lo tuve que frenar como pude … como te imaginarás renuncié al otro día.
El tipo es muy manipulador, te envuelve y te puede llegar a cagar la vida
¿viste? … digamos que a este tipo la fama lo precede … vos me entendés.
Pedro
se queda inmóvil, pálido.
-Disculpame
… eh … disculpá … estás bien? –
Tratando
de reaccionar – Si, si … lo que pasa es que estoy un poco cansado ¿te jode
mucho si te hago las copias para mañana?, ya voy a empezar a cerrar –
-Todo
bien, no hay problema –
Temblando
de pies a cabeza
-A
nombre de quién? –
-Gustavo
Robles – dice con una sonrisa extraña – hasta mañana entonces – y se va.
El
rostro de Pedro está encendido, los ojos llenos de lágrimas, se queda ahí,
quieto, lo recorre un dolor insoportable en todo el cuerpo, se siente mareado.
En un
esfuerzo sobrehumano baja la persiana, la cierra con candado, cierra la puerta
y se queda sólo. Se desliza hasta quedar sentado en el suelo.
Nunca
se sintió más sólo e indefenso en toda su vida.
“No vos
Guille, no podés ser vos” murmura con desesperación.
Continuará …
Grace: Amarte fuerte! no solo por lo que escribís, sino por la bellisima persona que sos. Por todo lo que nos regalas en el blog y en fb tambien. No tengo palabras para agradecerte tanta sensibilidad y este regalo que recibimos cada vez que podemos leer unas de tus historias...Gracias, Gracias, Gracias!
ResponderEliminarHermoso!!!! Eso sí que Pedro no sufra mucho rato, me hace doler la panza cuando sufre, jaja. Gracias por tu pluma
ResponderEliminarY si la historia hubiera empezado mucho antes?
ResponderEliminarMucho antes hubieran empezado los quilombos!!!! jajaja
No lo dejes a cielito sufriendo mucho tiempo si?, porfi, porfi...
Graciela Liliana, cuanto me gusta esta historia. ¡Por favor el proximo capitulo lo antes posible!.. cuanto me duele cuando sufren. Y no quiero que estén separados.. pero confio en tu mágica pluma y se que pronto nos sorprenderas ( Guillermina Pedris)
ResponderEliminarGustavo Robles- con una sonrisa extraña- yo si defino esa sonrisa....de HIENA...asqueroso.
ResponderEliminarGRACIELA divino!!! hermosos ellos dos y me encanta como se muestra Guillermo ante pedro, expone todo lo que siente, él es su dueño , le da temor pero no restringe , me encanta.
querida Grace, esta historia es totalmente atrapante, tiene un ritmo sostenido que no decae, se llega al final deseando que no termine! me encantan estos P.& G más jóvenes, creados por tu pluma,,,Gracias!! por favor, la novena parte, pronto!
ResponderEliminarAsdfg, lo tengo que decir... Persona no grata ese GR, en mi cabeza lo único que veo es una mezcla de la sonrisa de modelo dental de Matías y la repugnante de Nazarre. ¿El propósito de este tipo es sembrar chimentos sobre Guille al azar, o sabe algo de ellos dos y Pedro es su víctima elegida premeditadamente? ¡Ays Grace, tan bien que veníamos y nos tirás un ladrillazo en el alma! Apiadate y no nos tengas mucho en vilo, que no resisto. Me voy a dar una vuelta por la casita de Pilar para recomponer mi fe. Pero antes de irme, te abrazo fuerte, por sacudirme los cimientos de la forma en que lo hacés. ¡Chapeau!
ResponderEliminarTocaya... noooooooo , ya no le soporto al Gustavo este , xq tuvo que aparecer ????? .... me imagino que con tu creatividad escandalosa , arreglaras todo rápidamente ,es que me encanta el amor de nuestros amores mas jóvenes , me encanta que haya amor y solo amor .....y espero con ansias la continuación !!! Graciela CT
ResponderEliminarHerrmooso relato,cuando lo leo diversas emociones pasan por mi. Gracias x brindarnos esyos cuentos maravillososn TENES CUENTOS TAMB EN FACEBOOK? Me pasas el link xfa" ! Abrazoo!
ResponderEliminarHermoso capitulo Graciela Liliana. Derroche de amor, y ternura por doquier.
ResponderEliminarY Guillermo siempre haciendo el sacrificio para no entorpecer la carrera de su amado cielito. "Yo me estoy muriendo cuando te digo esto Pedro, si me guiara por lo que siento te encierro acá y no te dejo salir mas". Eso es lo que vi siempre en Guillermo cada vez que ponía distancia entre él y Pedro. Espero ansiosa el próximo capitulo. Te felicito por tu gran sensibilidad.
Ayyyy hermoso todooooo, que alma preciosa sos Graciela!!, solo te pido no los hagas sufrir mucho, jajajaj, no enserio, una belleza total cada capitulo, cada palabra, sos una genia!!!, ya estoy ansiosa por la novena!!!!!!!!. Besos
ResponderEliminarAy Graciela son tan lindos, estan siempre con los sentimientos tan a flor de piel y se los ve tan enamorados y vulnerables que me emocionan muchisimo! Yo creo que Pedro a esta altura de las cosas, luego del shock inicial va a poder ver claramente quien es Guille mas alla de lo que le digan.Por favor no los hagas sufrir mucho tiempo ni a ellos ni a nosotros! Amo profundamente esta historia y te la agradezco desde el corazon!!!! Maria Elena
ResponderEliminarYa estoy esperando el cap. 9, Graciela Liliana! porque acá me quedo, sufriendo con Pedro... Pero a TU historia le tengo fé, confío en que van a ir superando los obstáculos (como a este Robles horrriiiible). Gracias!! San
ResponderEliminargrace de mi corazonnnnnnnnnnnnnnnnnnnnnnnnnnnnnnnnnnnnnnnnnnnnnn,me partiste al medio con un exocet!!!!!!!llore hasta quedarme sin lagrimas,como AMOOOOOOO ,tu historia, lo siento a pedro desde las entrañas,que girazo le diste ,tiemblo jjaajajajaja.sabes que te quiero y que te admiro con todo mi corazon!!besotes y claro esta fan ansiosa te pide la continuacion amiga.
ResponderEliminarMe encantan todos tus relatos!! Espero ansiosa el proximo, no tardes mucho en escribirlo, por favor!!!!!!!!!!!!
ResponderEliminarno se ni q decir ya d esta historia - me tiene consumida, asi como ellos estan consumidos en su amor - eres mas q genial, no soporto q tenga q esperar dias al siguiente capitulo, d verdad q quitas el sueno, me imagino cada gesto, cada caricia, cada beso, cada platica d ellos - gracias x darme esto aunque es para todos/as - me lo quedo como mio - ansiando lo q sigue!
ResponderEliminarsimplemente perfecto y exquisito como cada capitulo de esta historia q
ResponderEliminarsin duda es mi preferida