#FragmentosdelavidacotidianaGuilledro
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Diálogos con uno
mismo. La luna de Pedro.
En silencio apaga la luz del comedor y
antes de subir mira por la ventana de la cocina la luna que ilumina imponente. Las
noches de luna llena siempre le provocan una extraña sensación, un leve vértigo.
“…Bueno, me fumo el último y subo a
dormir. Algún día voy a tener que dejarlo, pero seguro que no esta noche. La luna
siempre me invita a fumar.”
Enciende el cigarrillo y sale a la galería
a escuchar las cigarras y los grillos que ya a esta altura son parte de la familiaridad
del diario vivir. “Mira vos donde terminé...
quién lo hubiera dicho con lo que me gustaba la joda. Alejado del ruido y la
velocidad, disfrutando de una vida simple, sin altibajos, ya tan establecido y
seguro. No parezco yo… quien soy yo?... quien era yo?”
Por un instante los grillos se callan y
no corre ni siquiera una leve brisa, silencio absoluto, todo detenido en ese
ahora. El río manso, la luna que se refleja y el sonido de su
respiración. Y quieto así de repente lo siente, lo recuerda, lo sabe allí cerca
durmiendo, encuentra las mil razones y las vive con el cuerpo. “… Lo que se es capaz de hacer por amor, por
favor!… cuántas veces me habré reído de historias muchísimo menos locas… que
míseros seres involuntarios resultamos cuando alguien nos invade el alma... algún
día pasará? Esto, algún día va a pasar?
Ahoga el final de la brasa y cierra la
puerta, con esa nostalgia hermana de la tristeza, que aparece al comprender con
total certeza que estamos a merced del destino, sin claves para el futuro;
rodeados de incertidumbre y totalmente desbordados de emoción. “Es tan rico el olorcito de esta casa...
Deben ser los troncos de palosanto que se empeñó en traer del norte. Siempre le
dá lo mismo todo, pero cuando se emperra con algo, mamita! No hay quien pueda
disuadirlo… y después esos ojos con el “te lo dije” en el brillo, cada vez que
comento algo al respecto.”
Atraviesa la habitación y bajo el umbral
se queda mirándolo. Duerme profundo, plácido, guardándole un lugar en su pecho.
Las manos apoyadas sobre su lado de la cama, como llamándolo. “…¿Cómo puede tener esas manos?… Desde el
primer día fueron como imanes, símbolo rotundo de toda protección y seguridad,
pesadas, calientes, tan suaves… Hoy estoy como la luna, un boludo!... Basta.
Mejor me baño porque sino no duermo más.”
Abre la ducha y se queda con la mirada
perdida en el vapor, mientras el agua caliente lo moja y abriga; lo ensordece
con ruido a lluvia, lo transporta hacia adentro como un mantra que desentierra
una profunda emoción. Se ve allí, entero, feliz. Se da cuenta por enésima vez cuanto
lo ama, entiende con todos sus poros quien era, quien es y ya, nada más existe.
“… Es que no puedo diferenciar lo que soy
de lo que somos… Estoy loco! ¿Dónde quedó el tiempo, las ideas, los planes… ya nada
de eso importa! Se ha transformado en una parte de mí que me define y me
acompaña todo el tiempo… como si nada hubiese sido antes de Esto… Daría
cualquier cosa por estar acá, así, para siempre… ¿Cómo puede ser tan grande…?
Y con el agua se pierden las lágrimas,
junto con la risa que ilumina todo.
Todavía húmedo se mete en la cama y ocupa
el lugar reservado para él, al abrigo de sus manos y su pecho, que lo aprietan
instintivas con fuerza. Y ya al borde de quedarse dormido escucha el susurro:
- ¿Qué dice la luna, precioso?
Magnífico, y esa foto, fiel reflejo de estas palabras tan bien escritas y de este tramo de vida tan bien vivida!!!!!
ResponderEliminarSimplemente exquisito relato!!!!!! Genia total. Felicitaciones. Manuela Valle
Hay Mina si te digo que estoy llorando ,pensaras que loca....pero si....es tan hermoso pensarlos así como los describís....y con esto me doy por satisfecha.....""Se ve allí, entero, feliz. Se da cuenta por enésima vez cuanto lo ama, entiende con todos sus poros quien era, quien es y ya, nada más existe. “… Es que no puedo diferenciar lo que soy de lo que somos… Estoy loco! ¿Dónde quedó el tiempo, las ideas, los planes… ya nada de eso importa! Se ha transformado en una parte de mí que me define y me acompaña todo el tiempo… como si nada hubiese sido antes de Esto… Daría cualquier cosa por estar acá, así, para siempre… ¿Cómo puede ser tan grande…?"" Eso pregunto ¿Domo puede ser tan grande? Gracias,mil gracias.....
ResponderEliminar"Y con el agua se pierden las lágrimas, junto con la risa que ilumina todo". Lo mismo me provocò al leerlo, lágrimas y una sonrisa. Una hermosura Mina, gracias!!!
ResponderEliminarGracias por esta hermosa historia! Feliz de pensarlos en esta cotidianidad! Bello este amor, bellos ellos, bello relato!!! Felicitaciones, gracias por escribir y compartir! Susy
ResponderEliminarPrecioso Mina, muy muy bello. Gracias por estas voces interiores...
ResponderEliminarSublime, bellísima, un placer leerte Mina. Gracias.
ResponderEliminaremocionante del principio hasta el fin.....majo
ResponderEliminarMiles de gracias por los comentarios! Y a la linda editora que está en cada detalle y brinda el espacio para que Estos Dos hablen.
ResponderEliminarMina.
CUANDO HABLAN, CUANDO CALLAN, CUANDO NOS HACEN ESCUCHAR SUS PENSAMIENTOS, NOS ENAMORAN.SIEMPRE NOS ENAMORAN.LINDISIMA VIÑETA.TODA TERNURA.MONICA DE LANUS
ResponderEliminarTodo es bello entre ellos, cuando se piensan, cuando se huelen, cuando se sienten, cuando se perciben y también cuando callan,,,Gracias por esta hermosa narrativa Mina...Mil gracias!!
ResponderEliminarMuy fuerte muy atrapante perfecto genia total
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