miércoles, 30 de octubre de 2013

Mudanzas (3ra parte) By Graciela Liliana

Suben al auto de Pedro y ya están yendo cuando al llegar a la esquina mira por el espejo retrovisor:

No lo puedo creer – sonríe

Qué? … qué pasa? – se preocupa Guille

Genio y figura … Cuca acaba de llegar al estudio … Graziani safamos por esto – y hace un gesto con los dedos.

Guille suspira aliviado
Para que me escuches la próxima vez –

Tranquilo mi amor … igual – y lo mira provocándolo – me gustó eso de estar casi como ilegales en el estudio, a punto de que nos descubran, tendríamos que volver a repetirlo ¿no te parece?

Con pelea y todo? – lo mira Guille con ternura

Con pelea y todo … - le sonríe - con tal que la reconciliación sea como la de anoche – dice mientras toma la mano de Guille y la besa.

La bocina del auto de atrás los obliga a volver a la realidad y seguir.

Sigue en pie lo que me dijiste anoche? –

Cuál? … dije muchas cosas – lo esquiva Guille

Lo de mudarnos … vivir juntos … eso … -

Mmm … no sé Pedro … eso lo dije en un momento de debilidad … entendés eso?–

En una maniobra rápida y brusca Pedro estaciona el auto.

Perdón? … era mentira? … ya te digo, no voy a aceptar eso Guille … no lo pienso aceptar – dice mirándolo furioso

Guille mira hacia adelante casi indiferente
Se nota que Pedro está haciendo un enorme esfuerzo para contenerse.
Entonces Guille gira la cabeza y lo mira a los ojos divertido

Me gustás enojado … - dice mientras acaricia la barba de Pedro con ternura – dale, llevame allá … -

Adónde? … - desconfiado

Vos pensás que soy tonto Pedro? Si me hiciste ese planteo es porque ya tenés un lugar en vista … te conozco – le dice señalándolo con el dedo.
Pedro aliviado, sonríe bajando la vista al verse descubierto.

Me conocés … me conocés … claro que me conocés … sos un hijo de puta Graziani … me hiciste enojar –

Viste chiquitín qué malo soy? –

Por toda respuesta Pedro le da un beso y luego pone en marcha el auto. Se siente feliz.

Diez minutos de trayecto y Pedro estaciona frente a una casa antigua, no muy grande pero con un gran frente cubierto de árboles que la aíslan de la calle.

Pedro baja y se encamina rápidamente hacia la reja y la abre con una llave que había sacado previamente de la guantera.

Desde allí se da vuelta y lo mira con una amplia sonrisa a Guille, que lo mira con ternura y lentamente se baja del auto y se encamina hacia él. Cuando llega a su lado mira la casa y luego lo mira a Pedro.

Y? – le sonríe – me vas a mostrar nuestra casa? –

Claro que sí – Pedro se emociona – vení

Pedro abre la puerta.
Recorren la casa, que a pesar de su antigüedad se conserva impecable.
Es luminosa, con grandes ventanales y una cocina amplia que atrae de inmediato la atención de Guille.
Un living cubierto de estantes que llegan al techo, un dormitorio pequeño y el otro, el que va a ser de ellos mucho más grande y con una gran puerta ventana desde donde se puede ver la parte posterior de la casa, una gran extensión de verde, con árboles  y plantas que se pierden más allá de la vista.

Guille mira pensativo a través del ventanal. Pedro lo observa en silencio, esperando.
Graziani se da vuelta y lo mira, percibiendo la ansiedad en la mirada.
Se acerca a él.

Mirá cómo estás – le dice buscando sus ojos –

No sé … ¿te gusta? – inseguro

Y a vos? –

Me encanta –

Entonces ya está, si a vos te gusta a mí también –

En serio te gusta? –

Vas a vivir conmigo? –

Claro que sí! –

Entonces me encanta – lo mira enamorado Guille

Ahora sí la sonrisa de Pedro es la más hermosa que Guille ha visto.
Pedro lo abraza emocionado y Guille sonríe y lo besa tierno en la mejilla.

Dale, llamá a esta gente y deciles que sí –

Pedro no se hace rogar y de inmediato toma el celular y llama a los dueños. A los pocos minutos vuelve y ve a Guille recorriendo el patio, mirando las plantas, aspirando el aire fresco de la mañana.

Pedro va a su encuentro. Guille se da vuelta. Están muy próximos.

Ya está, la casa es nuestra –

Se quedan mirando en silencio por un largo rato.

Ves? … - acaricia la barba de Pedro - frente a mi tengo todo lo que necesito, el resto son paredes –

En ese momento Pedro siente que su amor por Guille no le cabe en el pecho.

Se besan honda, profundamente, con una ternura que conmueve.

Cuándo nos mudamos? – pregunta Guille

Ahora mismo si querés –

Quiero –

En principio podemos traer algunas cosas como para acomodarnos … no sé … mesas, sillas, algo de comida, un colchón … -

Que no falte el colchón – sonríe Guille – sacamos algunas cosas de casa pero pocas, no quiero mudar la casa de allá a esta

Me parece perfecto … igual yo … - vacila bajando la vista

Vos qué? … qué hiciste? –

Bueno, tenía esta idea desde hace tiempo así que …-

Qué? – buscando su mirada

Nada, fui comprando algunas cosas y las dejé en la casa de una pareja amiga mía … así que podemos contratar un flete para que las traigan hoy mismo … te parece? –

Guille se ríe con ganas

Qué hijo de puta! … ya tenías todo comprado … no si yo soy un gil –

Estás arrepentido? –

Jamás … dale llamá a tu flete y vamos a casa a buscar las cosas

No te vas a arrepentir Graziani –

Y vos … no te vas a arrepentir? –

Me arrepentiría de no hacerlo … dale vamos –

Ese mismo día Guille y Pedro se mudaron a su nueva casa y pasaron la primera noche de su nueva vida juntos.


Mudanzas (2da parte) by Graciela Liliana

El taxi se detiene en una especie de descampado cubierto de pasto, que se eleva un poco y desde el cual se puede ver la ciudad iluminada.
Guille baja y se dirige hacia el hombre que recostado fuma un cigarrillo y cada tanto toma un poco de cerveza.

Guille se para junto a Pedro.

Puedo? –

Pedro permanece en silencio sin mirarlo
Guille acomoda su saco y se sienta sobre él.
El aire está quieto y fresco, es una hermosa noche.
Están uno junto al otro sin hablar.

Pensé dónde podía encontrarte y me acordé de este lugar del que me habías hablado – sonríe – pobre taxista lo volví loco, hasta que por la descripción lo encontramos … - Me gusta, es un buen refugio.

Pedro exhala el humo del cigarrillo despacio.

Varias veces te dije de venir pero nunca quisiste – murmura

Es verdad sí –

La mano de Guille busca la de Pedro, pero éste la aparta

Tan enojado estás conmigo que no querés ni que te toque? –

Pedro clava sus ojos en los de Guille, la mirada profundamente triste.

Y que querés? … que salte de alegría?, como si fuera un perro al que le acariciás la cabeza?–

Tenés razón, tenés razón Pedro … tenés razón –

Otra vez el silencio.

Hablé con Fabián – pronuncia las palabras con esfuerzo

Pedro no responde

Pudimos hablar bien y le pude decir todo … le dije … que decida qué va a hacer de su vida y … que me voy a ir de la casa … con vos … no sé … si todavía querés … vivir conmigo … - prosigue ante el silencio de Pedro – Dios mío! … estoy aterrado Pedro … decime algo … prefiero que me putees pero hablame … no doy más …

No obtiene respuesta.

Suspira resignado.


Busca la mirada de Pedro pero este permanece con los ojos fijos en el suelo.

Ok … muy bien … -

Se incorpora, toma su saco, se queda unos instantes parado al lado de Pedro y luego se va.

--------------------------------------------------------

Decide no ir a su casa porque no quiere las preguntas de Fabián y tampoco encontrarse con la probable visita de Ana.

Pasada la medianoche llega al estudio. Se dirige a su despacho, se sirve un poco de whisky y se sienta en su sillón. Trata de beber un sorbo pero el dolor le cierra la garganta como una tenaza.

Apoya la cabeza en las manos y entonces todo el llanto contenido le estalla en el alma, llora desconsoladamente, desolado, desesperado, sigue así largo rato hasta que embotado por las lágrimas se adormece.

No sabe si han pasado minutos, horas, siglos, pero un ruido lo hace despertar sobresaltado. Tarda unos segundos en reponerse y darse cuenta de que está en el estudio, mira la hora y ya son pasadas las  dos de la mañana.

Alarmado se dirige despacio hacia la puerta de su despacho y cuando está por llegar se le aparece la figura de Pedro.

Se lleva la mano al pecho

Pedro! … me asustaste! … ¿Qué hacés acá? … -

Y vos? Qué hacés acá? –

Me acordé que no había regado las plantas – irónico

Ah mirá vos – serio

Guille pasa sus manos por su cara tratando de despertarse

Voy a preparar café … ¿querés? –

Me vendría bien – responde Pedro – hace frío

Guille se le acerca despacio

Mucho frío tenés? – lo mira con ternura

Bastante sí –

Guille masajea los brazos de Pedro tratando de darle calor

Así está mejor?

Están muy próximos y se miran intensos

Sí  – sonríe tímido – y con un café mejor todavía …

Guille suspira y luego se dirige a la cocina.

Sirve café en dos tazas grandes.

Pedro se aproxima, Guille le agrega azúcar y le acerca la taza.

Y vos siempre café amargo – observa Pedro

Viste? –

Permanecen de pie uno junto al otro, toman el café.

Pedro tiembla un poco de frío y Guille busca una manta y le cubre los hombros. Nuevamente le masajea los brazos y la espalda.

Mejor? -  buscando la mirada

Ahora sí – dice Pedro mientras deja la taza en la pileta y lo mira ahora sí directo a los ojos

Permanecen unos instantes así hasta que Guille sin poder resistirlo más, acaricia la cara de Pedro y sus manos se deslizan hasta su boca acariciándola suave.

Pedro cierra los ojos, toma la mano de Guille y la besa, luego la dirige despacio por su cuello y por su pecho. Guille respira entrecortadamente y apoya su frente en los labios de Pedro, éste la besa y luego busca la boca de su amante.

Se besan como si fuera la primera vez, con timidez al principio, con desesperación después.
Se miran temblando los dos de pies a cabeza.

Perdoname Pedro … perdoname … no quise lastimarte – murmura Guille

Shhhhhh!!! – lo detiene Pedro poniendo un dedo en sus labios, mientras comienza a besarlo cada vez más apasionado.

------------------------------------------------------------------------

Apenas logran llegar al despacho antes de caer el uno en brazos del otro en el piso.
En la oficina no … no quiero en la oficina – alcanza a decir Guille
A quién le importa? – le responde Pedro excitado mordiéndole el mentón - Menos mal que está alfombrado – ríen agitados.
Luego ya ninguno de los dos puede hablar más.
Se aman y se entregan con la misma urgencia que la primera vez hasta estallar uno en brazos del otro.
Se duermen abrazados, exhaustos, felices.

-----------------------------------------------------

Guille despierta sobresaltado, Pedro duerme con su cabeza apoyada en su pecho.
Pedro! – le sacude el hombro mientras le besa la frente – amorcito tenemos que irnos, ¿Qué hora es? …

Pedro entredormido se abraza más a él

No sé … - haciendo un esfuerzo se despereza y mira el reloj – son las cuatro de la mañana, dormite dale – y se abraza de nuevo a Guille

Es que no quiero que nos vean así, tené piedad de mí chiquitín-

Pedro entonces se incorpora, se restriega los ojos y lo mira

Qué pasa mi amor?, es temprano, es sábado y hoy no viene nadie –

Y si viene alguien? Y si entran y nos ven acá? No, no, me muero de vergüenza Pedro –
Qué vergüenza, nada de vergüenza, no quiero irme, quiero quedarme con vos un rato más acá … dale … por favor – susurra al oído de Guille mientras su nariz se desliza por su rostro en un movimiento suave y sensual.

No tenés piedad, sos malo conmigo – murmura Guille cediendo ante el avance de Pedro.

Pedro entonces se tira encima de Guille y lo mira, los ojos grandes y traviesos asomando entre el pelo desordenado.

Yo sabía Graziani que hoy no te me escapabas –

Así que sabías? Mirá vos … - responde Guille divertido – tanto no sabías, porque estuvimos peleados y sufriendo como dos pelotudos.

Bueno, vos y yo somos así ¿no?, pero gracias a eso estamos acá … y yo no pienso irme …– sin dejar de mirarlo busca su boca y la muerde suave para luego cerrar los ojos y hundir su lengua en ella, no tarda en sentir la respuesta de Guille debajo de él.

Sos incansable precioso – suspira agitado

Sí, estaría todo el día así con vos, me volvés loco Graziani –

Mmm … yo también pero nos tenemos que ir – dice Guille intentando vanamente resistirse

Pedro se detiene un momento y lo mira desafiante

Tenés miedo que nos encuentre Cuca? –

Sos un impertinente – dice Guille sonriendo y le hace cosquillas por debajo de la manta

Pedro se ríe con ganas mientras  lo toma por los brazos y lo inmoviliza

Estás en mi poder Graziani … y no te pienso soltar … -

A vos te parece que me tengas así y que yo te lo permita? –

Shhhh!!!! – lo hace callar Pedro, mientras desliza su mano buscando por debajo de la manta – shhhh! –

Guille ya no ve nada, bastaría que Pedro apenas lo rozara de nuevo para sentir que se va, pero Pedro no se lo permite, no todavía …

Entonces ahora sí, urgido también él por un deseo incontenible, Pedro ya no puede controlarse y en el mismo momento en que siente el gemido final de su amante, su cuerpo estalla, su cabeza estalla y todo él se derrama en un grito enloquecido.

Transpirados, con el corazón desbocado, se desmayan uno en brazos del otro.

Se quedan así, sin abrir los ojos, desconectados del mundo y sin querer volver a él.

Te amo Pedro – le susurra Guille al oído.

Pedro lo escucha y sin abrir los ojos ..

Te amo Graziani … con locura te amo –

Y se duermen hundidos el uno en el otro.

-------------------------------------------------------


Mierda ya son casi las 9 de la mañana, apurate Pedro! … por favor … – dice Guille mientras ordena todo para que no queden pruebas de la presencia de ellos dos en el estudio.

Vení un minuto – le dice Pedro divertido – dejá que te acomodo la camisa … el gran Guillermo Graziani huye furtivamente de su oficina acompañado por su amante el abogado Pedro Beggio! –

Cómo te gusta!  Cómo te gusta verme así cagado hasta las patas! – dice Guillermo entre molesto y seducido

Pedro termina de acomodarle la corbata y lo mira serio

Estamos juntos, sos mío, sos mi pareja, yo no me avergüenzo de eso … vos sí? –

Por supuesto que no … por supuesto que no Pedro … pero soy pudoroso, vos sabés eso, me gusta preservar nuestra intimidad … - tomando el rostro de él en sus manos - ¿vos creés de verdad que yo podría avergonzarme de vos? … - se le corta la voz por la emoción – yo me muero por vos Pedro, quiero estar el resto de mi vida con vos, no quiero otra cosa … sos mi cielo … me levanto por vos, respiro por vos … cómo voy a avergonzarme de lo nuestro? –

Pedro sonríe con ternura
De verdad? –

Guille busca sus ojos
No tengo más verdad que esa –

Bueno, vamos entonces – lo besa una vez más – a ver si viene Cuca y ante el hecho consumado nos obliga a casarnos.

Guille le da una palmada suave en la mejilla

Lo que dije … sos un atorrante … -

Tu atorrante preferido -

Sonríen cómplices

Luego revisan todo meticulosamente y al ver está todo en orden se van.

Continuará...

Mudanzas (1era parte) by Graciela Liliana


Hola mi amor ¿te falta mucho? – dice Pedro entrando al baño donde Guille trata de afeitarse, pero los nervios le están jugando una mala pasada.

Carajo … estoy torpe … mmm … estoy nervioso Pedro, este caso me pone tenso y  no me gusta – Suspira.

¿Me dejás que te ayude? – pregunta Pedro con dulzura

Mmm? … ayudarme? –

Si – le sonríe – con la afeitada, dejame, a ver

Pedro cubre la cara de Guille con espuma de afeitar y luego pasa la maquinita con calma mientras Guille lo observa hacer, más calmado, casi dócil.

Te divierte esto ¿no? –

La verdad que sí – responde Pedro riendo, divertido – me encanta esto Graziani, me gusta que dependas de mí – le dice secando con una toalla los últimos restos de espuma y acariciando luego con el dorso de la mano el rostro de Guille que lo mira serio, intenso.

Sos un atorrante ¿cómo hago para irme ahora? – dice Guille tomando el rostro de Pedro

Y no te vayas … – Pedro cierra los ojos y le besa las manos

Se besan apasionados, Guille acaricia la espalda de Pedro por debajo de la remera y éste le afloja la bata mientras besa el cuello de su amante y sigue bajando hasta su pecho ahora desnudo.

Pedro – murmura con dificultad Guille – no precioso, no me hagas esto, me tengo que ir

No estoy haciendo nada – continúa Pedro mientras de nuevo busca la boca de Guille.

De nuevo se besan, más profundamente esta vez.

Pero Guille logra con dificultad separarse un poco.

Me tengo que ir – dice suspirando con los ojos cerrados y apoyando su frente en la del otro.

Que tengas un buen día mi amor –

Ya es un buen día - acaricia una vez más el rostro de Pedro y sale del baño

Beggio lo sigue con la mirada
La próxima no te me escapás Graziani – sonríe.

----------------------------

Cuando Pedro baja ya Guille se ha cambiado y preparado el desayuno, se detiene en la escalera, ama mirarlo mientras él no se da cuenta y prepara el café, las tostadas, acomodando todo prolijamente.

Pensé que ya te habías ido –

No, tengo un rato todavía y quiero que desayunemos juntos – dice Guille sirviendo el café -  Fabián! … dale Fabián! – le grita a su hijo

Ya va viejo! – se escucha la voz del aludido

Se sientan a la mesa, Guille entrecruza las manos.

Está mal acostumbrado … muy mal acostumbrado –

Acostumbrado por vos – dice Pedro al mismo tiempo que se da cuenta de que esas tres palabras pronunciadas casi sin querer  van a dividir el día.

Dale – la respuesta no demora ni un segundo – decilo todo, no te quedes con las ganas, vamos

Nada, que Fabián es muy dependiente de vos … eso y … – lo mira y a pesar de que ve lo que se viene continúa – eso tiene que ver con vos, te enojás con él pero sigue haciendo lo que quiere porque de última sabe que lo vas a cubrir …

A cubrir? … ah mirá vos … así que yo cubro a mi hijo – corre la taza y tira la servilleta, parece que hubiera recibido una bofetada – y qué se supone que haga a ver según vos

Nada mi amor … -

No … mi amor no … en estos momentos “mi amor” no, no me trates como a un pelotudo, empezaste a hablar ahora seguí, te escucho – hace un visible esfuerzo para contenerse

Pedro trata de medir cada palabra - Fabián ya es un hombre pero vos muchas veces lo tratás como a un crío pequeño, protestás pero él sabe que gritás un poco y finalmente termina haciendo lo que él quiere. Es inteligente, listo, sensible … y a la vez caprichoso y acostumbrado a que vos le salves las papas del fuego siempre.

Guille entrecierra los ojos en silencio sin decir palabra
Te lo tenías guardado, cómo te lo tenías guardado!, ¿así que eso pensabas de mi como padre? –

No, yo no dije eso –

Claro que dijiste eso – estalla – claro que dijiste eso! …

No, yo creo que sos un padre maravilloso –

Ah!!! no la arregles!, no me ofendas encima tratándome como a un estúpido –

Jamás te trataría así porque no pienso eso – intentando que lo escuche – simplemente digo que Fabián necesita crecer, cortar un poco el cordón umbilical con vos, hacerse cargo de su vida …

Dejame de joder con esa psicología de mierrrrda … ¿me escuchás? … dejame … de … joder, no tenés ni la más puta idea de lo que es criar un hijo solo y bastante bien lo crié, no tenés la más puta idea así que no me vengas con frases fáciles de revistas de peluquería. Cordón umbilical! Pero dejame de joder!!! –

Nunca dije que lo hubieras criado mal yo … -

Basta! Se acabó! – acompaña el gesto con la mano

No te podés poner así! Estamos hablando no me podés tratar así –

Yo te trato como se me canta las pelotas y más cuando te metés en la relación entre mi hijo y yo –

Furioso – Perdoname, pero me meto porque si mal no recuerdo soy tu pareja y vivimos juntos, ¿o estoy equivocado? … así que tampoco me vas a tratar como se te cantan las pelotas, eso se terminó –

Y para mí también se terminó esta conversación – Guille se levanta

Todavía no dije todo –

A mirá vos!, no querido, catarsis en el desayuno no –

Pedro no se amedrenta, ya comenzó y aunque salte todo por los aires nada lo va a detener.

Quiero que nos mudemos –

El silencio casi se puede oir

Escucha a sus espaldas la voz de Guille llena de ira

Qué dijiste? –

Esta es tu casa, es la casa tuya y de Ana y de Fabián, es tu casa de antes de conocerme, es la casa de tu vida anterior a mí. Quiero que vivamos en un lugar que sea de los dos, no me importa dónde pero … -

Y vos te creés que yo tengo cabeza para pensar en esa pelotudez ahora? –

Lo vas a tener que pensar, porque yo no quiero seguir viviendo más acá y esta discusión me demuestra que tengo razón. Vas a tener que decidir Guille –

Me estás amenazando?, yo no te lo voy a permitir … no te lo voy a permitir! –

Vas a tener que decidir … -

No decido un carajo! Andate a la mierda Pedro!, si querías cagarme el día lo conseguiste, estate contento –

Vas … a tener … que decidir. Yo no voy a seguir viviendo acá –

Ah no? … ah no? – haciendo un esfuerzo para contener su ira, se acerca a Pedro y le habla casi al oído – andate entonces …

Pedro traga saliva, tiene un nudo en la garganta y no hay lugar del cuerpo que no le duela. Se levanta despacio y sin mirar a Graziani toma su celular, su saco y su maletín y se va en silencio.

-----------------------------------------------

Guille no atina a moverse, la mirada perdida, tratando de recuperarse pero sin lograrlo.
En eso baja Fabián, todavía sin cambiarse, se rasca la cabeza y bosteza.

Buen día viejo –

Se sirve el café. Guille permanece en el medio de la cocina sin moverse.
Finalmente Fabián repara en la situación
Pedro? … - pregunta mirando a su padre

Pedro … - apenas murmura Guille – Pedro se fue …

Ah! … qué raro … en general siempre se van juntos … pasó algo? –

Si – lo mira directo a los ojos – vos …

Yo? – ahora presta atención – qué tengo que ver yo?

Que ya está hijito, ya está, hasta acá llegó mi amor. Tenés que crecer Fabián, ¿te das cuenta de eso hijo?, mirate, ya tenés 21 años, ¿qué vas a hacer de tu vida hijo? –

Qué te pasa viejo, ¿por qué me venís con esto ahora? –

Es que no podés seguir así Fabián!, no podés seguir así hijo!, mirate por favor, volviste a la universidad y para qué ... ¿pensás que soy boludo? … sé que estás cursando una sola materia y que prácticamente no estás yendo, estás haciendo lo mismo que antes, me voy yo y te quedás todo el día acá sin hacer nada … -

No es así viejo –

Fabián!!! … no me trates como un boludo por favor! … teneme un poco de respeto! –

No te trato como un boludo! … yo no tengo la culpa si discutiste con Pedro …

Sacalo a Pedro de esta conversación te lo pido por favor, respetame carajo!, soy tu padre!-

Fabián se mantiene en silencio

Se terminó hijo, hasta acá llegué –

Qué querés decir con “hasta acá llegué” –

Fabián, si yo sigo así vos vas a seguir así, haciéndote el boludo, no haciéndote cargo de tus cosas, culpándonos de todo a Ana y a mí. Y ahora cada vez que podés nos atacás a Pedro y a mí por ejemplo dándole las llaves a Ana para que entre y se meta en nuestras vidas y después cuando hay quilombo vos ponés tu mejor cara de yo no fui como que no tenés la culpa de nada … tenés 21 años hijo, hacete cargo de tu vida Fabián de una buena vez! –

Y que querés que haga? –

Lo que quieras, pero hacé algo hijo!, estudiá, laburá, trabajá de streaper si querés pero hacé algo con tu vida … yo te voy a ayudar en lo que decidas pero no te voy a bancar si seguís así … -

Qué?, ¿me estás amenazando con cortarme los víveres?, ¿es eso? –

Te das cuenta de cómo me hablás? … no … no te voy a “cortar los víveres” como vos decís … por ahora … pero las cosas van a cambiar … no pueden seguir así –

Y cómo van a seguir? –

Guille suspira cansado

Van a seguir con vos viviendo en esta casa, si querés con tu madre viviendo con vos en esta casa … -

Vas a volver con mamá? – incrédulo

Vos creés de verdad que yo puedo volver con tu madre? –

No, pero estás diciendo que mamá puede volver a vivir acá conmigo … y Pedro y vos?, ¿qué onda? –

Ninguna onda … Pedro y yo nos vamos –

Adónde? –

No sé … a cualquier lado … no importa eso – Guille se deja caer en la silla junto a Fabián y hablando para sí mismo – Dios mío! … es increíble …

Qué? –

Pedro … - pronuncia el nombre emocionado

Estás bien? –

Voy a estar bien … - sonríe – voy a estar bien …

Acaricia el rostro de su hijo

Pensalo hijo, pero hacelo pronto y usá la cabeza –

Le da un beso, toma sus cosas y sale.

----------------------------------------------

Todo el día Guille lo pasa en Tribunales.
De Pedro ni noticia. Llama a su celular pero lo tiene apagado.
Finalmente la audiencia por el caso de estafa pasa a un cuarto intermedio para alivio de Guille que siente que el día le da una tregua para reponerse de tantos frentes que se le han abierto hoy.
Vuelve a la casa. Fabián no está y aunque mantenía alguna esperanza Pedro tampoco.
Va al estudio donde Beto y Gaby lo están esperando para hablar sobre la estrategia a seguir con la audiencia aplazada para el lunes siguiente.
Guille les dice que lo planifiquen ellos, que por hoy ya no tiene cabeza para más.
Nota que Pedro no ha ido al estudio y tratando de preservar su intimidad decide no preguntar.
Agotado se sienta en el sillón de su despacho
Beto olfatea que algo pasa y se acerca silencioso

Pasa algo Guille? –

No … ¿por? … -

No sé, hoy lo vi a Pedro que estuvo un rato y se fue sin decir palabra, ahora te veo a vos así, preocupado … pregunto viste … no te quiero joder … -

Nada, no pasa nada Beto, estate tranquilo –

Si querés charlar estoy acá cerca, ya sabés –

Ya sé Beto … ya sé, traten de resolver con Gaby lo de la audiencia, eso me va a ayudar, yo estoy agotado –

Ta – se queda mirándolo sin decidirse

Guille lo mira impaciente - ¿qué pasa? –

Nada nada … me voy –

Chau – auyentando la posibilidad de una confidencia

Guille se estira en el sillón y cruza las manos por detrás de su cabeza.

Se queda así unos instantes y de repente como levantado por un resorte toma el teléfono y llama un taxi, acto seguido agarra su saco y se va tan rápido que Beto y Gaby no alcanzan a preguntarle nada … esa era la idea.


(continuará …)

martes, 29 de octubre de 2013

Y se deja caer By Nora

 Y se deja caer

******* 

Cruzó la calle distraído, tratando de recordar cuándo había sido el día en que se animó a pensar en lo que le estaba sucediendo, y pensó que no había sido un día, sino una noche, después  del estudio cuando llegó a su casa y al abrir la puerta lo recibió Camila con su gesto de siempre,  la melosidad habitual, la charla intrascendente , el mi amor, te amo, me vestí linda para vos y ahí, por primera vez, pensó que sólo quería estar con él, que ya no le importaba ponerle nombre a  ese deseo, quería llegar, tirar el saco sobre el sillón y verlo atravesar el living, ir hacia él, tomarle la cara entre las manos y besarlo, preparar la cena juntos, volver a discutir un caso, recordar los  excesos de Marcos, los mohines de Gabriela cada vez que Alberto se acerca para decirle qué lindos le quedan los anteojos, esa primera imagen permitida le abrió las puertas a tantas otras imaginadas después en las noches sin sueño, el cuerpo mojado, y la pregunta rondando, ahora qué, cómo seguir, cómo levantarse y pretender que la mañana disipará todo, lo arrebatado del día, Tribunales, los nuevos clientes, pero no, el día amanece con la cara de Guillermo, su mano en su frente, esa caricia que siempre le hace cuando la ternura  avanza, se deja caer y ya no hay retorno, por eso después de la ducha, el auto azul lo espera y acelera para llegar primero que nadie, abrir la puerta y encontrarlo, sabe que ya está ahí, acomodando esos papeles con la camisa negra entreabierta y la corbata esperando el nudo, mientras se acerca, los buenos días se amontonan con las palabras precipitadas, dichas a un centímetro de su boca, palabras nuevas, pienso todo el día en vos, mi amor, qué vamos a hacer con esto, y Guillermo lo besa sin pausa mientras lo empuja con firmeza hacia el rincón del despacho y sus manos lo recorren entero, descubriendo ese cuerpo nuevo de los dos, así, pide Guillermo, y él no sabe qué es lo que está haciendo pero sabe que lo está haciendo bien, porque le estallan el pecho y el sexo  antes de cerrar los ojos y ver una vez más a este Guillermo que ya es suyo cuando la camisa cae sobre el piso y el teléfono suena, insiste, sin remedio.

Capitulo 56 by Lilita

Disclaimer: Estos personajes no son míos, pero tampoco de Segade ,  Aguirre ó Polka: A llorar al campito muchachos. Porque decidí alejar a Pedro de la historia?: porque está teniendo una participación acotada. O sea…se podía.
Ilgora Blue, gracias por esos maravillosos feedback. Gracias totales!
Este es el espacio de los sueños… 
******************************************
En el capitulo anterior: Juan Arismendi y Guillermo hablaban en el despacho.


G: Me hace bien hablar con vos, me alivia
Juan: Claro, nos conocemos mucho, no hay rencores.
G: Y también fuiste muy importante para mi
Juan: (riendo) Hasta que llego Pedro, y te pinto esa sonrisita que tenes ahora…y mejor me voy, porque sino...
Juan los saluda afectuosamente y se va.

Guillermo queda solo en su oficina trabajando, entra Marcos.
Marcos: Guille, te presento a José Miller.
José: Mucho gusto Dr. Graziani
G: (extendiendo su mano para saludarlo) No seamos tan formales, podemos tutearnos...tomen asiento.
Marcos se quedó durante la entrevista.
G: Es bueno saber que tenemos visiones similares de la Justicia: Sé que Marcos te comento las condiciones para trabajar con nosotros y me imagino que vos le habrás dicho las tuyas.  
José: La verdad es que sos muy reconocido en Tribunales, conozco a muchos ex alumnos tuyos y también a tu hermano.
G: (sonriendo) No creo que de ahí vayas a sacar buenas referencias
José: A los hombres también  se los conoces por sus enemigos y te puedo asegurar, que eso también fue un incentivo para querer trabajar con vos.
G: (sintiéndose intimidado) Sos muy directo para decir lo que pensás.
José: Y también sincero.
G: Si estas en condiciones de empezar a trabajar, sos bienvenido.
Jose: (extendió su mano) Gracias. Esta bien hoy mismo?
Cuando Pedro lo llamó, Guille estaba saliendo del estudio.
P: Amor? Como estas? Te llamé más temprano y me saltaba el contestador.
G: Agotado. Día de mierda!  Y con Frutillita en el postre: me llamó Camila
P: (sorprendido) Cómo qué te llamo Camila?
G: Si, mejor me olvido de las pelotudeces que dijo, sino voy a la casa: se la prendó fuego con  ella y su escoba voladora adentro.
P: Yo me encargo Guille, tené paciencia

Martes:Estudio Graziani.  Guillermo y Gaby hablan en el despacho. 
Gaby llora sentada y Guillermo camina impaciente detrás del escritorio.

Gaby : Vos no confías en mi
G: Cómo no voy a confiar en vos? Por favor!!!....  Claro que confió, pero tenés que entender que somos incompatibles en el trabajo, vos sos una buena abogada….excelente para algunas cosas, pero el mundo penal es de los guerreros
Gaby: (enojada y gritando) Yo soy una amazona si quiero!. Y te lo puedo demostrar
G: (tratando de calmarla)Vos entendés mi situación? Sabés cuál es?
Gaby: Obvio que la sé…vos preferís a cualquiera antes que a mí
G: No,no….por favor! Esto es diferente, necesitamos clientes, necesito que el estudio crezca, es el momento de alianzas no de divisiones.
Gaby: Y yo soy la que divide? Vos sos el que divide y reina: Guillermo Graziani.

Gaby se va de la oficina, Beto mira con bronca a Guille parado del otro lado del pasillo y sale corriendo detrás de Gaby.

Suena el teléfono, Guillermo respira profundo, cierra rápidamente la puerta de su despacho
G: (baja el tono y sonrié) Hola cielito
P: Hola, te pido un favor Guille, te va a llamar Roberto Sandoval de mi parte, es un conocido que me pidió asesoramiento y lo derivé para que hablé con vos, podés llevar el caso personalmente?
G: Si, como no. Estás bien?
P: Apurado, tengo una reunión en un minuto.
Guillermo escucha una voz femenina:
Voz -Pedro, ya llegaron todos…
P: Gracias, diles que ya voy
G: (intentando sonar casual) Quién es?
P: Mi secretaria
G: (intentando sonar más casual) Tenés secretaria?
P: (sonríe) Si, se llama Carolina
G: Carolina? Mira qué lindo nombre…
P: Te llamo después, te mando un beso
G: Otro.
Guillermo corta y tira el teléfono sobre el escritorio con furia.

Miércoles: Estudio Graziani. Sala de Reuniones, el equipo al cual ya se ha incorporado José Miller escucha atentamente al cliente.

Roberto Sandoval : Cuando comencé en la empresa, siempre tuve un trato claro, de hecho comencé en un escalafón muy bajo antes de llegar a ser encargado de área. Hace un año ingreso el nuevo gerente y de ahí en más comenzó mi calvario. Al principio pensé que eran exigencias normales de un gerente puntilloso: pero después  me cambio de tareas, comenzó un trato despectivo y humillante, hostilidades, frases hirientes incluso frente a otros empleados. Fue aislándome. Viví todo este tiempo atemorizado, me hizo realmente sentir inútil, llego a hacerme responsable de situaciones que ni siquiera pertenecían a mi área
José: Hay testigos de este trato?
Sandoval: Por supuesto, empleados, clientes y hasta proveedores
José: Lo afecto esto a otro nivel?
Sandoval: Como síntomas físicos, comencé con afecciones en la piel, después la alopecia y la ansiedad me llevo a engordar, tengo un sobrepeso notable.
José: Socialmente lo afectó?
Sandoval: Comencé a bajar mi rendimiento en todos los niveles. Antes hacía deporte y pasaba tiempo con mi familia, pero comencé a hacer horas extras todos los días, revisaba planillas hasta 5 veces antes de entregarlas, y siempre me las devolvía por cosas insignificantes. Mi mal humor me llevo a tener una grave crisis en mi matrimonio.
José: Hubo algún tipo de modificación en sus ingresos?
Sandoval: No, de hecho hizo arreglos con gente de las otras áreas para la parte en negro y a mí nunca me dio el aumento, aunque lo pedí en varias oportunidades. Incluso lo hizo con gente de menor rango y con menos tiempo en la empresa.
José: Hay pruebas documentales, mails, notas, memorándums que puedan reflejar esta diferencia?
Sandoval: Si, los hay. Los tengo en mi poder.
José: No sé qué pensaran los demás socios, pero las características son de un caso de mobbing ó acoso laboral. Quiero que sea consciente Roberto, que el camino que ud emprenderá no es fácil, es probable que haya intercambio de cartas documentos, antes de plantear un despido indirecto. En ese momento podremos entablar la demanda.
Marcos y Guillermo se miran.
Guillermo: Estamos totalmente de acuerdo, con el Dr. Miller y tomaremos su caso.

Jueves: Estudio Graziani. José y Guillermo hablan en el despacho
G: Bueno José, primero quiero felicitarte por la intervención de ayer en el caso Sandoval, estuvo realmente muy acertada.
José: Gracias, si algo me dejó mi paso por la fiscalía es el preguntar sin descanso.
G: (rie) Si, es verdad.
José: Estas ocupado? Te invito a almorzar?
G: (Guillermo lo mira por sobre sus anteojos, extrañado) No, te agradezco pero no faltará oportunidad.
José: Sabés que me tomó una par de horas al mediodía, no?
G: Si, algo me comentó Marcos
José: Lo que sucede es que colaboro con un comedor, damos de comer a 50 personas de lunes a lunes.
G: En serio? Mira que bien
José: Si, hace 8 años que empecé, primero asesorando y ahora directamente de lleno…
G: Y porque lo haces?
José: Bueno, a mi viejo le daban de comer en un comedor, para él fue el puntapié para que estudiará y se superará.
G: (se saca los anteojos y lo mira extrañado) Que raro sos…
José: Por qué?
G: Dejar una carrera en la justicia, tenías un gran futuro como fiscal…y venir a caer acá, a un estudio….es raro
José: Hay momentos que son encrucijadas en la vida, donde lo que parece más es menos y lo que parece menos es más.
G: Y tu familia, tu mujer, no intentaron hacerte cambiar de opinión?
José: Conmigo, hay cosas que son imposibles. Igual mi familia está lejos: mis padres en Tres Arroyos, mis hermanos en el exterior. No hay esposa ni hijos.
G: Ah, me pareció que si…(hace un silencio). Te parece si seguimos trabajando?

Aeropuerto, puerta de arribos: Guillermo espera ansioso a Pedro,  lo ve, levanta su mano y sonríe.
P: (se acerca y lo abraza) Que suerte que viniste mi amor
G: Corrí todo el día para llegar, me haces mucha falta.
P: Ya estoy aquí.

Continuará....


Mobbing (también conocido como acoso laboral ó acoso moral ó violencia laboral):Según el último informe presentado por la Organización Mundial de la Salud (OMS), en América Latina alrededor de cuatro millones de personas padecen actualmente acoso psicológico en el trabajo.