miércoles, 6 de noviembre de 2013

Despertar by Paula

Esta historia nace en el capítulo 73, a partir del cambio de una palabra. Beto en lugar de decirle a Guille “Llamá a la policía”, le dice “Llamá a una ambulancia”.
Los personajes le pertenecen a Aguirre, Segade y Polka. Menos Pedro, que es nuestro, porque ellos lo mataron.

CAPITULO 1

Que calor, hacía esa mañana. Guille se apuró a bañarse, tenía que estar en el hospital temprano, porque los clientes que tenía en el estudio habían pedido adelantar la reunión.
Personalmente no le interesaban en lo más mínimo esos clientes, pero les había prometido a Gaby, a Beto, a Fabián, incluso a Marcos, que iba a volver a ocuparse de casos en el Estudio, que iba a volver a poner su vida en marcha.
Haber hecho esa concesión no significaba que iba a dejar de ir al hospital, estaban todos locos si pensaban eso!!! Aunque los demás creían que el loco era él.
Tomo un café a las corridas, agarró el saco y salió casi corriendo (iba a tener que cambiarse de nuevo la camisa en el estudio, pero no le importaba), el remise ya lo estaba esperando en la puerta de su casa, pero todavía tenía que parar en la panadería para llevarles a las enfermeras unas masitas de regalo. Casi todas los días era parte de su ritual,  una forma de agradecerles todo lo que hacían.
Llegó al hospital y fue directo al 4to. piso, como todas las mañanas desde hacía tres meses.
La enfermeras que lo vieron venir, lo saludaron con una sonrisa, todavía eran las del turno noche, pero por supuesto, también lo conocían.
Cuando entro a la habitación, como todas las putas mañanas, se le cortó la respiración, sentía que se le cerraba el pecho. Igual avanzó decidido hasta la cama y se sentó en la silla que había al lado.
Respiró profundo para calmarse, una de las enfermeras le había dicho una vez, que los pacientes percibían todo y que no les hacía bien el estrés de las visitas.
La profunda dulzura de su mirada se posó en la figura que yacía inmóvil en la cama, con sumo cuidado le agarró la mano, la palidez de la piel contrastaba con la suya.
Suavemente le acarició la frente y le acomodó el pelo, ese gesto que había hecho tantas veces, que le había devuelto tantas veces sonrisas irresistibles, ahora sólo recibía un mudo silencio como respuesta. Notó que todavía tenía algo de fiebre, la infección que lo había atacado la semana pasada, no terminaba de irse, no era  grave para cualquier persona, lo peor ya había pasado, pero la máscara de oxígeno que cubría parte de la cara de Pedro, le recordaba que unas líneas de fiebre seguían siendo peligrosas para él.
Puta madre, pensó, cuanto más de esto voy a poder aguantar? Los médicos dicen que hay actividad cerebral, pero cada vez me miran con más lástima porque no despertás.
Siguió acariciando con infinita ternura la mano que sostenía entre las suyas y finalmente se quebró. Ya no aguantaba más, el llanto se escapó de su garganta, las lágrimas le corrían por las mejillas.
-“Pedro, Pedro, por favor, volvé conmigo, no aguanto más”, sollozaba, “no aguanto más”.
-“Te extraño, necesito ver tus ojos, tu sonrisa, necesito contarte que la semana pasada finalmente fue a la cárcel Miguel”. “No doy más, los médicos dicen que hay actividad en tu cerebro, pero parece que te refugiaste en un lugar del que no querés volver, por favor Pedro, volvé conmigo, no doy más”. “No doy más”, repetía incansablemente aferrado a esa mano helada.
No podía dejar de hablarle, se acordó de Pedro diciéndole, “yo no quiero hablar, pero con vos se me escapan las palabras”, le estaba pasando lo mismo.
Sentía que cada día que pasaba Pedro se iba escapando de su lado, alejándose a un lugar al que él no tenía acceso.
Cuando le sacaron el respirador 2 meses atrás, los médicos, las enfermeras, esperaban que despertara, que saliera del coma, pero no, Pedro parecía estar empeñado en mantenerse en ese lugar inalcanzable. La semana anterior había sido terrible, la infección en los pulmones se había ensañado con el cuerpo debilitado de Pedro, el estar acostado hacía 3 meses, no había ayudado en nada. La fiebre era altísima y le costaba respirar, los médicos habían hablado de volver a conectarlo al respirador y ese hubiera sido el final, pero Pedro nuevamente había demostrado su capacidad de lucha y luchó contra la fiebre dos días. Parecía que había ganado la batalla esta vez.
La desesperación de pensar que nunca más iba a poder estar con Pedro se apoderó de Guille, no podía dejar de llorar, con la mano que tenía libre se tapó la boca, no quería que su llanto atrajera a las enfermeras, no quería que lo separaran de Pedro.
Se aferró con todas sus fuerzas a esa mano y repetía incesantemente, “Por favor, por favor, por favor…”
Nunca supo el tiempo que estuvo así, suplicando, pero algo lo sacó de su estupor, había sentido en su mano un movimiento, no puede ser, se dijo, esas cosas solo pasan en las películas, no me pasan a mí.
Pero de vuelta esa mano delgada y pálida, pareció apretar la suya.
-“Pedro, Pedro”  empezó a llamarlo.
Lo miró fijamente a la cara, parecía que esos párpados que habían estado tanto tiempo inmóviles, estaban haciendo un esfuerzo por abrirse.
Guille, se paralizó, por un segundo unos ojos desconcertados y brillantes por la fiebre, buscaron su mirada antes de cerrarse nuevamente.
Alcanzó a apretar el botón para llamar a las enfermeras, antes de que se abrieran de vuelta.
Pedro parecía estar haciendo un esfuerzo por despertar.
Entraron dos enfermeras corriendo, la llamada de Guillermo las había alarmado. Cuando vieron a Guille sollozando al lado de la cama se imaginaron lo peor. Se apuraron a chequear los signos vitales del paciente y también se paralizaron cuando vieron los ojos de Pedro que hacían un esfuerzo por mantenerse abiertos.
Una de las enfermeras salió corriendo a llamar al médico, mientras la otra intentaba controlar la salud de Pedro.
Guille parecía una estatua al lado de la cama, no había soltado la mano de Pedro ni un segundo,
La enfermera intentó comunicarse con el paciente, pero los ojos de Pedro cansados y ansiosos sólo buscaban la figura de Guille.
Pedro se empezó a agitar porque la enfermera no lo dejaba ver a Guille, del monitor cardíaco se dispararon las alarmas. Guille viendo la agitación de Pedro pareció salir de su trance, corrió la enfermera a un lado, con ambas manos agarró cariñosamente las mejillas de Pedro y empezó a hablarle con ternura
“Pedro, precioso, tenés que calmarte, estás muy agitado”
Pedro intentaba sin mucho éxito, sacarse la máscara de oxígeno de la cara.
Guille intentaba razonar con él, “Pedro, por favor, estuviste muy enfermo, estás en el hospital, calmate”
A medida que Guille le hablaba, el chiquitín iba calmándose, pero hacía esfuerzos todavía por sacarse la mascarilla. Guille entendiendo sus intenciones, corrió con cuidado la máscara de su cara.
Pedro, con los labios partidos, la boca seca, hizo un esfuerzo: “¿Qué pasó?” – susurró - ¿Dónde….?
Un ataque de tos cortó sus preguntas, Guille se apuró en volver a colocarle la masacarilla. Pedro luchaba por mantenerse despierto, pero parecía que esas pocas palabras que había pronunciado le habían quitado todas las fuerzas y con una última mirada a Guille, se durmió.

En ese instante, Guille sintió que las piernas se le aflojaban y se dejó caer sobre la silla.

Continuará.....

28 comentarios:

  1. que paso?!!! ayyyyy noooo......hay continuación????????????? por favor!!!!!!!!!!!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Por supuesto que continúa, el capítulo 2 está en la revisión final. Gracias!!!! Paula

      Eliminar
  2. Gracias Paula por sumarte al sueño, por creer como nosotros que otra historia era posible. El amor no conoce de finales, y "esto" lo nuestro es puro amor: Gracias por tu acto de fe. Y por la emoción que me llegó hasta la médula: "no aguanto más”, sollozaba, “no aguanto más”....Bellas palabras de un más bello hombre!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Lili, gracias a vos por este espacio, el refugio en nuestra imaginación es lo único que nos salva de los sádicos!!!
      Y gracias por tus palabras, ya te lo había dicho, pero viniendo de vos un honor!!! Paula
      PD:Espero la actualización de tu historia!!!!!!

      Eliminar
  3. Muy bueno, Paula! es una escena que todas deseamos ver..,gracias por hacerla posible!!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Gracias por tomarte el tiempo para leer, sigue... Paula

      Eliminar
  4. Me encanta este espacio de talento e imaginación, mucho más de la que hay en la tele. Gracias! Aquí tienen una lectora fiel de su blog.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Gracias!!! Escapar de las atrocidades que le han hecho a Pedro y a la novela es nuestro derecho!!! Paula

      Eliminar
  5. Sin palabras......... Las lágrimas recorren mis mejillas, este era el final que merecian................Espero ansionsa la continuación....GRACIAS:

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. No llores, vamos a tener final feliz!!! Gracias por tus palabras, me emociona que alguien se emocione con lo que escribo. Paula

      Eliminar
  6. Que lindo ya quiero leer la continuacion por favorrrrrrrrrrrrr =)

    ResponderEliminar
  7. Felicitaciones!! Sencillamente me dejaste sin palabras...y muchas gracias por este espacio donde se muestra talento y creatividad dia a dia. Espero leer muy pronto la continuacion!!! :)

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Gracias por leer y hacerme llegar tus palabras!!! El espaciolo creó la genia de Lilita, es nuestro refugio. Ya viene el 2. Paula

      Eliminar
  8. Paulaaa! qué hermoso! me emocionaste. Qué maravilla. Qué hermoso Guille cuidando a Pedro trayéndolo de nuevo a la vida y a él. Gracias gracias gracias!!! Lo que escribiste nos ayuda a despertar del mal sueño del capítulo 74. Por favor, quiero el segundo capítulo. Un abrazo

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Que me digas eso vos que sos "la escritora" de dos de mis fics preferidos, me llena de orgullo. Gracias a vos por tomarte el tiempo de comentar. Ya viene el 2°, tranquila (ya me parezco a Pedro). Abrazo! Paula

      Eliminar
  9. Bello, tal vez lo que muchos esperamos...final feliz porfissss!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Por supuesto que vamos a tener final feliz, para hacernos sufrir están Aguirre y Segade!!! Paula

      Eliminar
  10. Ayyyyyyyyyy me muero de amor!!!!!!!!! precioso, magistral no hay palabras que describan exactamente lo que siento al leerte y al leer cada una de estas hermosas historias, felicitaciones!!!!!!!!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Gracias Marcela, es un placer escribir y poder recuperar lo que es nuestro! Porque Pedro, Guille y su historia de amor, son nuestros. Paula

      Eliminar
  11. Ojala hubiera sido este el final q eligieron, que depsues de tanto sufrir le dieran la oportunidad de vivir... hermoso Paula!!!! me hiciste llorar igual que Chavez hablando con Cuca anoche :) Te felicito!

    ResponderEliminar
  12. Paula! después de la actuación magistral de Chávez en el final del capítulo de anoche, pensé que yo ya no la remontaba más... devastada... y entro y me encuentro con esta maravilla, con Pedro y Guille juntos otra vez y aún más, con la fuerza de ese inmeso amor capaz de volver a Pedro a la vida... tan bellamente descripto... CONTINUACIÓN YA!!!!
    Y algo más: me encanta tu introducción: bastaba UNA palabra para evitar todo el dolor, todo el desasociego... y no tuvieron la grandeza/compasión/alegría de usarla: pero vos sí. Y en cuanto a Pedro... ¿posesivas nosotras? Jamás!!!

    ResponderEliminar
  13. pAULA CAPA TOTAL COMO DECRIBIS LOS SENTIMIENTOS DE GUILLE ME HICISTE LLORAR,ESPERANDO EL PROXIMO CAPITULO,GRACIAS CHICAS A TODAS INCREIBLES ESCRITORAS ,LAS VOY A RECOMENDAR CON SUAR PORQUE PARECE QUE EN POLKA SE LES AGOTARON LAS IDEAS GRACIASSSSSSS TOTALES

    ResponderEliminar
  14. La continuacion please!!! ojalá los tontos de los guionistas hubieran pensado algo asi... hermoso.... gracias

    ResponderEliminar
  15. Pedro es nuestro! Que amorrr <3

    ResponderEliminar
  16. Lloro a oscuras con mi notebook en la cama

    ResponderEliminar