I
Algo tímido se adentra. La música, las luces y el humo le impiden
registrar en plenitud las instalaciones.
La vista se adapta y asombrado
observa el Lugar. Los boliches gay se han tomado la ciudad, muchos van en busca
de un levante ocasional, otros a disfrutar del ambiente y otros pocos como él,
a encontrar respuestas, respuestas de si “eso” es para él.
Con el trascurso de los minutos ha declinado cinco salidas a bailar,
el doble de manoseadas a su trasero, sin contar insinuaciones y palabras lujuriosas. Y se pregunta ¿qué
carajos hace allí? ¿Un hombre recién casado y con ciertas dudas por algunos
sueños estúpidos que ha tenido? decide tomarse el último trago y fumarse el
último cigarrillo. Nada tiene que hacer allí. Nada lo mueve, nada lo cautiva,
nada le gusta. Paga, se levanta y tropieza. El hombre reniega, pide disculpas,
se miran, la noche automáticamente cambia y la voz de Madonna retumba en el
local.
I can't stop thinking of you
The things we used to do
The secrets we once shared
I'll always find them there
In my memories**
II
Se deja invitar un trago en compensación por el estúpido tropiezo
¿acaso no se iba a ir? , de nuevo una sonrisa. El hombre lo escanea con la
mirada.
- ¿Novato?
- ¿Qué?
- Primera vez…acá
- Eh. Sí.
- ¿Incómodo?
- Si…mucho…no es mi onda.
- No es tu onda…
Y lo mira profundo. Lo intimida, le corta el aire, se estremece y una
oleada excitante le penetra el cuerpo. Una hora después lo tiene acorralado
contra la pared, le come la boca a besos, el sabor de la piel y el olor a
limón, madera y canela de su perfume lo enloquecen.
- ¿Cómo te llamas?- Beso en la oreja
- Alfredo- miente, y recibe otro beso en la garganta - ¿y vos? – a
punto de flaquear las piernas.
- Joaquín- Y le muerde la piel del cuello junto a la oreja. Cierra los
ojos escapándosele un gemido.
III
No sabe si es el licor o la
sensación quemante sobre sus labios o en su sexo que le hacen temblar el
cuerpo. Huyó despavorido cuando se sintió arrastrado por el hombre. Lo dejo en
la puerta parado y corrió a tomar un taxi. Que Cobarde.
Ya mañana será otro día; se dice y así trascurren semanas. Lo sueña
nítido noche a noche, la mirada clara y penetrante, la mirada turbia por el
deseo, las manos expertas, el sabor de su boca y el olor, su olor.
¿Por qué pienso tanto en vos? ¿Es normal pensar tanto en alguien?
IV
La reunión es sobre el medio día, busca la dirección y parquea.
Organiza las carpetas. Se presenta y le indican la oficina del abogado dueño y
encargado del caso invitándolo a seguir mientras lo espera.
Le gusta el lugar; sobrio, acogedor y muy intelectual. Se nota que al
hombre le encanta su trabajo. Escucha el murmullo y el viento le trae el aroma
a limón, madera y canela. Antes de procesar los recuerdos escucha la voz
profunda a su espalda, se tensiona y nervioso traga saliva. Allí están los
ojos, sus ojos por qué se siente dueño de ellos, mirándolo perplejo.
- Guillermo Graziani, gusto en conocerlo…¿Dr Beggio?
- Si…Pedro Beggio- se estrechan las manos
V
Pedro nervioso se levanta y caen al piso los papeles de las carpetas
- Me mentiste
- No. Me protejo, vos si me mentiste- se acerca más, con la excusa de
recoger cada papel.
-¡ No!...yo solo, no sabía que decir…
Guillermo lo mira atento a cada movimiento. Siente algo de compasión,
ternura y mucha atracción verlo tan torpe en su presencia, se acerca y el
muchachito tiembla aún más. De nuevo las caricias sobre el rostro.
- Pienso mucho en vos- declara Guillermo- fui de nuevo, varias veces a
buscarte. ¿pensas en mi?
- Mucho…todo el tiempo pienso en vos, no puedo dejar de pensar en vos-
VI
Y el último hit de Madonna resuena a lo lejos coreada por la voz de la
nena que colabora en la oficina.
- ¿Alfredo o Pedro?- pregunta Guillermo cerquita a la boca carnosa
- Como a vos te parezca- sonrisa con hoyuelos
- Precioso…me gusta precioso.
**No puedo dejar de pensar en tí
Las cosas que solíamos hacer
Los secretos que un día compartimos
Siempre los encontraré ahí
En mis recuerdos
Intrigante, esencial en el análisis despiadado de un cambio, suavemente sensual. Hay todo. Miedo y ánimo, atracción y deseo. Mis felicitaciones Lupillar.. amo los espacios vacíos dejados a la imaginación de quien lee.
ResponderEliminarMe encantó! Muy pero muy bueno.
ResponderEliminarLucero, a tus pies. Te amo, amiga!
ResponderEliminarSeguí escribiendo!!!
Lucero..sos una genia. . Amo, adoro tu pluma..Gracias por llevarnos por éstos senderos tan exquisitos. Silvana
ResponderEliminarme desmaye!
ResponderEliminarLucero.... sos TODO!!!! Cande
ResponderEliminarPrecioso, como Cielito viisto a través de los ojos de su dueño...
ResponderEliminarUFFF!!! SENSUALIDAD PLENA. A SEGUIR IMAGINANDO.
ResponderEliminarEXCELENTE RELATO, FELICITACIONES.
"PRECIOSO...ME GUSTA PRECIOSO" AMARLOOOO INFINITAMENTE.
"SI...MUCHO...NO ES MI ONDA" DULZURA ETERNA.
GRACIAS POR TANTO.MONICA DE LANUS
Me gusto mucho, muchisimo!!! Seguí escribiendo y si es posible que este continua que me encanto este comienzo!!
ResponderEliminarSensualidad que desborda, un verdadero placer. Felicitas
ResponderEliminarUn placer ...realmente una delicia........Gracias .De corazón gracias......Me encanta la dulzura de Graziani......Gracias Mirta Ardemagni..
ResponderEliminarUno mas y no jodemos mas, ja,ja,ja.
ResponderEliminarMe gusta ese Guillermo que no se hace tantas preguntas, que va a por lo que quiere...hermosa historia Lu!
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