Capitulo anterior: http://actosdefeylibertad.blogspot.com.ar/2013/12/el-amor-es-un-acto-de-verdadera_10.html
******
Gracias Lili por la paciencia y la ayuda!!
******
Gracias Lili por la paciencia y la ayuda!!
******
"Todo lo que yo quisiera de ti son esas cosas cotidianas,
el olor de tu cuerpo, saber lo que piensas de cualquier cosa,
de ti, de mi, de nuestro entorno. Que mires más allá
de mi apariencia física, que me recuerdes con pasión y que el placer
que juntos inventamos sea otro signo de la libertad"
Julio Cortázar
el olor de tu cuerpo, saber lo que piensas de cualquier cosa,
de ti, de mi, de nuestro entorno. Que mires más allá
de mi apariencia física, que me recuerdes con pasión y que el placer
que juntos inventamos sea otro signo de la libertad"
Julio Cortázar
Guille había tenido unas semanas complicadas en el estudio. Mucho trabajo, casos que aún no se terminaban de resolver, demoras que lo ponían de malhumor. Pero bien sabía que no podía engañarse: la ausencia de Pedro lo angustiaba, era el fondo y la causa de su malestar. No podía negar que el miedo, ese maldito miedo que toda su vida lo condicionó, se interpusiera en ese amor ya confesado de Pedro.
No lo decía, jamás lo iba a confesar, ese fue siempre un rasgo
fuerte de su personalidad: tremendamente reservado, muy cuidadoso de dejar al
descubierto sus sentimientos, pudoroso en su accionar.
En su pasado, los encuentros ocasionales y hasta la relación con
Juan se vieron signados por esa misma conducta. Nunca se permitió vivir
libremente su amor. Hasta que conoció a Pedro.
Nunca se supo responder cómo una foto de un currículum lo había
movilizado tanto, cómo esos ojos que lo enamoraron el primer día que los vio
podían decirle tanto, provocar tanto en él.
A veces era imposible de controlar, se le perdían los ojos
mirándolo a Pedro, verlo reír, verlo trabajar, ver cómo se movía, cómo hablaba.
Nunca le había pasado algo así ... Claro, nunca se había enamorado.
Pero no era tan fácil. Y Graziani nunca se la hizo fácil a él
mismo.
Lo supo desde un principio, desde la primera reunión cuando
comieron juntos, los primeros casos que resolvieron, los primeros días juntos en
el estudio. Uno no elige de quién se enamora y en
qué momento, y Guille lo sabía.
Y vio en Pedro dudas al casarse, vio que recurría a él cuando
necesitaba algo, cuando estaba mal. Era tan vulnerable, tan transparente en sus
sentimientos, que Guille siempre supo de su confusión, de lo que le estaba
pasando con él. Pero no lo apuró, no lo condicionó, no le dijo ni una palabra de
lo que sentía, pero se lo demostró.
Y hoy, sabiendo que Pedro corresponde ese sentimiento y que este
amor que siente es tan grande que lo desborda, lo descoloca por momentos, no
puede más que esperar, contener a su amor y sobrellevar esta distancia que lo
angustia, lo lastima, pero que él decide imponerse. Por Pedro, siempre por él,
por cuidarlo, por contenerlo, porque lo ama demasiado como para no
esperarlo.
Verlo ayer en tribunales fue inesperado. No necesitó hablar, leyó
en la mirada de Pedro todo lo que él tenía para decirle. Vio los celos cuando lo
descubrió con Matías, la necesidad de acercarse, del abrazo, de demostrarle que
lo quiere, que lo elige, que lo espere, la emoción contenida, la sonrisa que lo
enamora.
Y no pudo reprimirse el pedido de que le escriba, de estar en
contacto, un contacto que respetara la situación que Pedro estaba viviendo y
tenía que resolver con Camila, un contacto que permitiera saber del otro, que
los acerque, que los contenga, un espacio sólo de ellos, único, necesario.
El día transcurrió sin ningún mensaje de Pedro. Numerosas veces
Guille revisó el correo, en intervalos entre reuniones y con la excusa de
prepararse un mate cocido chequeaba, pero no había noticias.
Llegó a su casa tarde, cenó con Fabián, charlaron. Trataba de pasar
más tiempo con su hijo, preocuparse de saber qué hacía, qué decisiones tomaba,
averiguar cómo era el lugar donde estaba trabajando. Fabián era el único refugio
que Guille encontraba en estos días.
------
Marcial había llegado en el momento indicado . Hacía dos años que no se veían, hablaban asiduamente, pero para Pedro tenerlo cara a cara y saber que podía contar con él, era una tranquilidad. Era su confidente, a quien se había animado a contarle que estaba enamorado de Guillermo.
C: - Amor, seguro no quieren venir con nosotras? Vamos, dale! Cambiate y nos acompañan!!
P: - No, gracias Cami. Estoy muy cansado, además ya organizaron para comer con Nancy, ella seguro quiere verte y charlar
con vos, si vamos nosotros, no van a poder hablar de sus cosas. Salí, divertite, pasala lindo, yo me quedo con mi primo comiendo en casa.
Sentados en el living, Pedro y Marcial recordaban viejas épocas, cuando eran chicos, mientras cenaban y tomaban unas cervezas.
P: - Y vos? No me contaste, estás con alguien, solo?
M: - No, no, solo estoy. No quiero problemas ...
P: - Problemas? Qué exageradoooo!! De verdad pensás que estar con alguien es un problema?
M: - Y sí, hasta que encontrás a la persona indicada, a esa que te cambia la vida, supongo que el resto es un problema ... por lo menos en mi caso.
P: - Bueno, es un punto de vista ...
Pedro se quedó pensando. Todo lo que él pensaba que era el amor, lo que había sentido, lo que había vivido, al conocerlo a Guille había desaparecido. Desde que lo vio por primera vez, la charla, la entrevista, Postiglione por estafas, la defensa de ese caso y toodo el tiempo que pasaron juntos, hicieron crecer en él sentimientos desconocidos.
Marcial volvió a preguntar:
M: - Hey, primo, dónde estás? En esta charla seguro que no ...
P: - Perdón, me quedé pensando
M: - En Guillermo?
Pedro sonrió, a su primo no le podía ocultar nada
P: - Sí, en Guille. Me quedé pensando en lo que me dijiste, de los problemas hasta que conocés a alguien que te cambia la vida. Sabés que a mi con él me pasó algo extraño, me descolocó lo que empecé a sentir cuando lo conocí. Yo estaba cansado de trabajar con mi suegro, siempre lo mismo, muy rutinario, muchos quilombos que resolverle. Quería que me pasaran cosas, no ser el típico abogado corporativo que llega a fin de mes, cobra el sueldo y trabaja de 9 a 17 completando formularios y llevando y trayendo expedientes. Por eso decidí cambiar, y presenté el currículum en el estudio; ya me habían dicho que Graziani era muy bueno trabajando, pero tenía un carácter de mierda, muchos quilombos.
Y cuando empecé a trabajar con él me di cuenta que me gustaba pasar tiempo juntos, que me gustaba estar con él, escucharlo, aprender. Me vi un montón de veces sentado en mi escritorio, ya habiendo terminado mi trabajo, sólo porque estaba a gusto ahí, porque la pasaba bien.
M: - Cuando conociste a tu socio te diste cuenta que no estabas enamorado de Camila, es eso ...
P: - Claro! En realidad no sabía lo que era estar enamorado hasta que lo conocí. Yo a Camila la quiero mucho, nos llevábamos bien, ella me incluyó en su círculo social, en el trabajo del padre, yo crecí mucho estando a su lado, pero ahora me doy cuenta que nada se compara con estar enamorado.
Pedro necesitaba hablar, quería contarle a su primo cómo se había enamorado de Guille, quería entender ese sentimiento que tenía por su socio y no podía manejar. Pero le resultaba complicado poner en palabras todo lo que sentía, lo que le pasaba cuando estaban juntos, el miedo a perderlo, la necesidad de estar con él.
Marcial fue a buscar otra cerveza, Pedro tenía ganas de hablar.
P: - Sabés que el día que me casé estuve a punto de irme, de salir corriendo. Trabajé todo el día, demoré lo más que pude en el estudio esperando que Guille me diga que no me case, no se ... esperando alguna palabra de él que me diera pie para dejar todo. Y él me acompañó al civil, casi que me empujó a casarme, yo creo que él sabía lo que a mi me estaba pasando y pensó que sólo era una confusión.
M: - Estabas confundido porque nunca te habías enamorado, no sabías lo que se sentía .... Y ahora, cómo sigue todo? Camila se muere si la dejás, está el embarazo, y está tu socio y todo lo que sentís por él.
P: - Sí, no se que hacer. Yo no voy a dejar a Camila en este momento. Quiero cuidar a mi hijo, si me separo, se va a angustiar, va a poner en riesgo el embarazo y eso es lo que no quiero que pase. Pero también se que Guille no me puede esperar toda la vida, tengo miedo que conozca a otra persona, que se canse de esperarme, siento que estoy siendo tan egoísta.
M: - Tenés que jugártela, Pedro. Si realmente estás enamorado de Guillermo, tenés que demostrárselo, que lo sepa ... sólo así te puede esperar, te puede acompañar.
------
Guille estaba acostado, no podía dormirse. Nunca podía expresar sus sentimientos: el miedo, la necesidad de protegerse, el no querer sufrir ni involucrarse demasiado. Y ahora, el miedo a que Pedro sufra, querer cuidarlo, protegerlo por sobre todas las cosas, incluso por sobre su propia felicidad.
Había estado todo el día revisando los mails y no encontró en ninguno el nombre de Pedro. Ya se estaba por dormir cuando sonó su celular con una notificación. Era un mail de él. Buscó sus anteojos, se acomodó en la cama y comenzó a leer.
De: Pedro Beggio
Para: Guillermo Graziani
23:22
"Hoy estuve charlando con mi primo. Siempre fue mi confidente desde chico, él me ayudaba cuando estaba mal, cuando necesitaba una opinión, en fin ... hoy le conté de vos, lo que me pasa, lo que siento.
Me acordé cuando me llamaste para la entrevista, cuando fuimos a comer y hablamos de ser socios, que no quería que me dieran órdenes (nunca lo cumpliste), que no iba a trabajar los viernes (trabajé hasta sábados y por la tarde!!!) ... Creo que me vas a tener que devolver de alguna manera todo esto que no cumpliste. Andá pensando ... Y sí, te estoy provocando !!!"
Guille iba leyendo y no podía evitar reírse y recordar cada uno de los momentos que Pedro nombraba. Podía enumerar cada detalle de esos encuentros, de esas primeras charlas, todo lo que sintió, lo que le pasó cuando conoció a Pedro.
" Lo que te quería decir, es que desde que te conocí te admiré, admiré tu trabajo, tu capacidad de resolver las cosas, tu seguridad. Pero también conocí una persona solitaria, que protege bajo siete llaves sus sentimientos, que hay días que no tiene paz y días que no lo dejan en paz. Que querés y cuidás a los tuyos. Siempre me sentí seguro con vos a mi lado. Y ahora que estoy seguro de lo que siento por vos, quiero cuidarte, quiero verte bien, y quiero que confíes en mi. Y para eso necesito que me cuentes cuando estás mal, que cuando te sientas solo me escribas, pienses en mi.
Marcial había llegado en el momento indicado . Hacía dos años que no se veían, hablaban asiduamente, pero para Pedro tenerlo cara a cara y saber que podía contar con él, era una tranquilidad. Era su confidente, a quien se había animado a contarle que estaba enamorado de Guillermo.
C: - Amor, seguro no quieren venir con nosotras? Vamos, dale! Cambiate y nos acompañan!!
P: - No, gracias Cami. Estoy muy cansado, además ya organizaron para comer con Nancy, ella seguro quiere verte y charlar
con vos, si vamos nosotros, no van a poder hablar de sus cosas. Salí, divertite, pasala lindo, yo me quedo con mi primo comiendo en casa.
Sentados en el living, Pedro y Marcial recordaban viejas épocas, cuando eran chicos, mientras cenaban y tomaban unas cervezas.
P: - Y vos? No me contaste, estás con alguien, solo?
M: - No, no, solo estoy. No quiero problemas ...
P: - Problemas? Qué exageradoooo!! De verdad pensás que estar con alguien es un problema?
M: - Y sí, hasta que encontrás a la persona indicada, a esa que te cambia la vida, supongo que el resto es un problema ... por lo menos en mi caso.
P: - Bueno, es un punto de vista ...
Pedro se quedó pensando. Todo lo que él pensaba que era el amor, lo que había sentido, lo que había vivido, al conocerlo a Guille había desaparecido. Desde que lo vio por primera vez, la charla, la entrevista, Postiglione por estafas, la defensa de ese caso y toodo el tiempo que pasaron juntos, hicieron crecer en él sentimientos desconocidos.
Marcial volvió a preguntar:
M: - Hey, primo, dónde estás? En esta charla seguro que no ...
P: - Perdón, me quedé pensando
M: - En Guillermo?
Pedro sonrió, a su primo no le podía ocultar nada
P: - Sí, en Guille. Me quedé pensando en lo que me dijiste, de los problemas hasta que conocés a alguien que te cambia la vida. Sabés que a mi con él me pasó algo extraño, me descolocó lo que empecé a sentir cuando lo conocí. Yo estaba cansado de trabajar con mi suegro, siempre lo mismo, muy rutinario, muchos quilombos que resolverle. Quería que me pasaran cosas, no ser el típico abogado corporativo que llega a fin de mes, cobra el sueldo y trabaja de 9 a 17 completando formularios y llevando y trayendo expedientes. Por eso decidí cambiar, y presenté el currículum en el estudio; ya me habían dicho que Graziani era muy bueno trabajando, pero tenía un carácter de mierda, muchos quilombos.
Y cuando empecé a trabajar con él me di cuenta que me gustaba pasar tiempo juntos, que me gustaba estar con él, escucharlo, aprender. Me vi un montón de veces sentado en mi escritorio, ya habiendo terminado mi trabajo, sólo porque estaba a gusto ahí, porque la pasaba bien.
M: - Cuando conociste a tu socio te diste cuenta que no estabas enamorado de Camila, es eso ...
P: - Claro! En realidad no sabía lo que era estar enamorado hasta que lo conocí. Yo a Camila la quiero mucho, nos llevábamos bien, ella me incluyó en su círculo social, en el trabajo del padre, yo crecí mucho estando a su lado, pero ahora me doy cuenta que nada se compara con estar enamorado.
Pedro necesitaba hablar, quería contarle a su primo cómo se había enamorado de Guille, quería entender ese sentimiento que tenía por su socio y no podía manejar. Pero le resultaba complicado poner en palabras todo lo que sentía, lo que le pasaba cuando estaban juntos, el miedo a perderlo, la necesidad de estar con él.
Marcial fue a buscar otra cerveza, Pedro tenía ganas de hablar.
P: - Sabés que el día que me casé estuve a punto de irme, de salir corriendo. Trabajé todo el día, demoré lo más que pude en el estudio esperando que Guille me diga que no me case, no se ... esperando alguna palabra de él que me diera pie para dejar todo. Y él me acompañó al civil, casi que me empujó a casarme, yo creo que él sabía lo que a mi me estaba pasando y pensó que sólo era una confusión.
M: - Estabas confundido porque nunca te habías enamorado, no sabías lo que se sentía .... Y ahora, cómo sigue todo? Camila se muere si la dejás, está el embarazo, y está tu socio y todo lo que sentís por él.
P: - Sí, no se que hacer. Yo no voy a dejar a Camila en este momento. Quiero cuidar a mi hijo, si me separo, se va a angustiar, va a poner en riesgo el embarazo y eso es lo que no quiero que pase. Pero también se que Guille no me puede esperar toda la vida, tengo miedo que conozca a otra persona, que se canse de esperarme, siento que estoy siendo tan egoísta.
M: - Tenés que jugártela, Pedro. Si realmente estás enamorado de Guillermo, tenés que demostrárselo, que lo sepa ... sólo así te puede esperar, te puede acompañar.
------
Guille estaba acostado, no podía dormirse. Nunca podía expresar sus sentimientos: el miedo, la necesidad de protegerse, el no querer sufrir ni involucrarse demasiado. Y ahora, el miedo a que Pedro sufra, querer cuidarlo, protegerlo por sobre todas las cosas, incluso por sobre su propia felicidad.
Había estado todo el día revisando los mails y no encontró en ninguno el nombre de Pedro. Ya se estaba por dormir cuando sonó su celular con una notificación. Era un mail de él. Buscó sus anteojos, se acomodó en la cama y comenzó a leer.
De: Pedro Beggio
Para: Guillermo Graziani
23:22
"Hoy estuve charlando con mi primo. Siempre fue mi confidente desde chico, él me ayudaba cuando estaba mal, cuando necesitaba una opinión, en fin ... hoy le conté de vos, lo que me pasa, lo que siento.
Me acordé cuando me llamaste para la entrevista, cuando fuimos a comer y hablamos de ser socios, que no quería que me dieran órdenes (nunca lo cumpliste), que no iba a trabajar los viernes (trabajé hasta sábados y por la tarde!!!) ... Creo que me vas a tener que devolver de alguna manera todo esto que no cumpliste. Andá pensando ... Y sí, te estoy provocando !!!"
Guille iba leyendo y no podía evitar reírse y recordar cada uno de los momentos que Pedro nombraba. Podía enumerar cada detalle de esos encuentros, de esas primeras charlas, todo lo que sintió, lo que le pasó cuando conoció a Pedro.
" Lo que te quería decir, es que desde que te conocí te admiré, admiré tu trabajo, tu capacidad de resolver las cosas, tu seguridad. Pero también conocí una persona solitaria, que protege bajo siete llaves sus sentimientos, que hay días que no tiene paz y días que no lo dejan en paz. Que querés y cuidás a los tuyos. Siempre me sentí seguro con vos a mi lado. Y ahora que estoy seguro de lo que siento por vos, quiero cuidarte, quiero verte bien, y quiero que confíes en mi. Y para eso necesito que me cuentes cuando estás mal, que cuando te sientas solo me escribas, pienses en mi.
Yo estoy, siempre, esperando saber de vos.
Te extraño! Te quiero!
Pedro"
Guille terminó de leer, emocionado. No contuvo las lágrimas, ya no, porque lo que sentía lo desbordaba, le hacía bien a pesar de la distancia, y no quiso negarse más lo que le pasaba. Era momento de dejar los miedos atrás, jugarse por su felicidad y por el amor que sentía por su chiquitín. Tenía que estar ahí, al otro lado de esos mensajes, poniendo en palabras todo aquello que por primera vez lo invadía, lo sorprendía, lo hacía tan felíz.
continuará ...
Te extraño! Te quiero!
Pedro"
Guille terminó de leer, emocionado. No contuvo las lágrimas, ya no, porque lo que sentía lo desbordaba, le hacía bien a pesar de la distancia, y no quiso negarse más lo que le pasaba. Era momento de dejar los miedos atrás, jugarse por su felicidad y por el amor que sentía por su chiquitín. Tenía que estar ahí, al otro lado de esos mensajes, poniendo en palabras todo aquello que por primera vez lo invadía, lo sorprendía, lo hacía tan felíz.
continuará ...
ay sol que ternura x favor !!!! me encanto. y me muero x saber como sigue tu historia .... Graciela CT
ResponderEliminarayyy que lindooo, me encanta esta historia y esperaba ansiosa la continuacion!!!
ResponderEliminarDivino....espero muy ansiosa lo que se viene!! Un abrazo y gracias por seguir escribiendo sobre ellos!!
ResponderEliminarSol me encanta cómo retomaste esta parte de la historia y la contás desde lo que ellos sienten por el otro a pesar de la separación física que vivieron en ese tiempo, de como siguen amándose y pensándose. Me pareció muy dulce el mail de Pedro, ojalá Guillermo también se anime a abrirse y pueda poner en palabras todo lo que está sintiendo. Gracias por esta hermosa historia!!! María Elena
ResponderEliminarQuè divinos estos dos hombres....todo lo que escribiò Pedro,quiero que Guille se anime a responderle dejando de lado tantos miedos.Mis partes favoritas:"Por Pedro, siempre por él, por cuidarlo, por contenerlo, porque lo ama demasiado como para no esperarlo"...."En realidad no sabía lo que era estar enamorado hasta que lo conocí" ...
ResponderEliminarSol, qué precioso!! por favor, seguí, que necesito ese reencuentro!!!
ResponderEliminarHermoso Sol, ojalà Guille pueda escribirle a Pedro todos sus sentimientos, todo lo que siente por èl. Pero seria todavia mejor que se anime a decirselo personalmente. Espero prontito la continuaciòn.
ResponderEliminarsol divino plagado de ternura y confesiones a corazon abierto, me encanto y ahora a agonizar hasta el proximo cap(la historia de mi vida)jajaajajja.majo
ResponderEliminarhermoso que lindo que escribis Sol ya quiero leer el prox
ResponderEliminarSol, que lindo!! Espero ansiosa la continuación...ya se que será una ternura total!! Gracias :*
ResponderEliminarMo
Sol, hermosa historia! espero que la próxima entrega llegue pronto... gracias!!
ResponderEliminarPRECIOSO, UNA TERNURA QUE EMOCIONA, TE JURO QUE CUANDO VOY LEYENDO EL RELATO, ME VOY REPRESENTANDO LAS IMÁGENES DE ELLOS DOS!!QUE DULZURA!! CUANTO AMOR!!
ResponderEliminarAy Sol!!!! Que bonito!! Que hermosos tu relato, cuanta ternura dejás entre linea y linea. Es reconfortante leer algo tan cálido y que se perpetúa como una instancias feliz para nuestros amados e inolvidables Guillermo y Pedro. Mil Gracias!!! ( Guillermina Pedris)
ResponderEliminarAHORA MAS QUE NUNCA NECESITAMOS DE ESTOS RELATOS QUE HACEN JUSTICIA AL AMOR DE PEDRO Y GUILLE.UNA CARICIA, UN MIMO, UN ABRAZO A NUSTRA ALMA TRISTE.SEGURO. QUE LEYENDO ESTAS HISTORIAS SE NOS VA A IR MUCHO MAS RAPIDO ESTA PROFUNDA TRISTEZA, Y ENTONCES SEGUIR DIFRUTANDO Y DIFRUTANDO,
ResponderEliminarY MIENTRAS DIFRUTAMOS ESPERAMOS LOS PROXIMOS PERSONAJES DE ESTOS DOS ACTORES INOLVIDABLES.YA FALTA MENOS, FALTA MENOS PARA QUE LA PESADILLA TERMINE, NO PUEDE NO PASAR...
Esperando la próxima entregaaaa. Quiero mucho amorrrr, por fi
ResponderEliminarTambién esperando la próxima entrega!! por favor queremos seguir leyendo!!! Susy
ResponderEliminar