Hosteria (4ta parte) by Elena

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Camila

(Especialmente dedicado a tod@s l@s loc@s que hacen posible Acto de Fe, un mix que espero les guste, con permiso de Ilgora y Guillermina)

Tema musical http://www.youtube.com/watch?v=SkvxqK7fNIo

Quiero ver a Pedro – es la única condición que pone Camila cuando el abogado viene a decirle que en unos días la liberan y que tiene que cumplir la ultima parte del trato, irse del país. No lo ve desde aquel día en que la llamo y la cito en el bar. Frío, no la dejo abrazarlo – Camila, mi nombre es Agustín -  escucho las explicaciones sin entender demasiado, la red de narcotraficantes, su papa, las cuentas, los cheques, varios asesinatos, lavado de dinero, y ella involucrada en todo, la vida de él corría peligro y necesitaba que lo ayude, iría a prisión unos pocos años si todo salía bien. Acepto, tal vez un poco apresuradamente para salvarse ella y salvarlo a él. Después toda esa gente en su casa, el arma, los disparos, el cadáver. Alberto estaba involucrado y sin embargo no le dijo nada a Grazziani. Una tumba falsa, el juicio, al menos ella sabe que Pedro está vivo y Guillermo no. En todos los años que lleva en prisión, el abogado le fue explicando y ella pudo entender la magnitud de la causa y porque debe irse del país. No sabe si aun lo ama o no, ni que fue de él en todo este tiempo, se da cuenta que ni siquiera sabe en realidad quien es, necesita verlo una última vez

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Temprano por la mañana suena el celular de Agustín. Guillermo, desde el baño, lo ve pasearse por la habitación, discute con alguien; la espalda tensa anuncia problemas, se acerca despacio. Se le hiela la sangre y el suelo se hunde bajo sus pies cuando escucha – sí, Madre. Corta el teléfono y lo arroja sobre la cama antes de darse vuelta y encontrar a un pálido e inmovilizado Guillermo, corre a abrazarlo – tranquilo, mi amor, no pasa nada- pero este lo empuja rechazándolo, está furioso – en que mierda andas? – Demasiado furioso para gritar – me explicas YA que estas haciendo otra vez con esa gente! YA, Pedro!

- Hoy liberan a Camila

- Y?

- Tengo que ir a verla, hablar con ella - explica despacio – hay que sacarla del país, necesita ayuda económica, ya está todo arreglado

- O sea que me venís mintiendo hace tiempo, porque vos? no puede ir otro? Siempre es así?

- No sabía que era justo hoy, me acabo de enterar – señala el celular e intenta acercarse pero Guillermo mantiene la distancia – ya está yendo Maidana a buscarla, se va a quedar con ella hasta que yo llegue y del resto se ocupa él

- Y la hostería?

- Queda cerrada unos días

- Perfecto! arreglaste todo per-fec-to! solamente se te olvido el pequeño detalle de decir-me-lo! – grita

- Amor, por favor….

- Amor nada! Justo hoy! Ya debe estar por llegar Laura, tenemos la audiencia por la guarda de los chicos y hay que ir a buscarlos porque seguro nos la dan y vos me salís con esto de Camila! HOY!

- Vamos a la audiencia, vas a buscar a los chicos, yo voy a ver a Camila y vuelvo, es un rato nada mas – imposible intentar calmarlo, se acerca

- No, no me toques….un rato, con Camila, debo tener mucha cara de boludo yo, andate Pedro, dejame solo por favor…

- Guillermo…..

- QUE TE VAYAS!

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Los ojos oscuros fríos como nunca los vio, es Agustín, no Pedro

A – Orestes tenía una casa en Montevideo, ahora es tuya, quiero que vayas allá con Nancy, Maidana las va a acompañar unos días hasta que se establezcan, está todo arreglado, documentos, cuentas bancarias, no les va a faltar nada

Camila – y vos te quedas con Guillermo

No le contesta, se saco la alianza antes de entrar al hotel, no puede darle datos

A – No empecemos, estas libre gracias a mí

C – Pero te amo

A – No, no me amas

C – Me mentiste

A – Mira Camila, vos no sos inocente….hicimos un arreglo y te libraste de bastantes años de prisión, trata de rehacer tu vida y olvidate de mi

C – Que fácil lo decís

A – Fácil no, pero si estoy acá es porque quiero que estés bien

C – Bien sin vos

A – Si, bien sin mí

C – Y si no acepto? – desafía inútilmente

Maidana – Si no aceptas estas muerta Camila, no podes elegir

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Camina lento, cansado, abatido, Guillermo tenía razón, se hizo más tarde de lo que pensaba y sabe que se perdió uno de los momentos más importantes de su vida, el momento de ir a buscar a los chicos y llevarlos a su nueva casa; además le falta pilotear la furia de Grazziani. Se detiene un momento en la puerta, huele a asado, se escucha música, risas y voces, reconoce algunas; se queda ahí parado varios minutos con las llaves en la mano y respira hondo antes de decidirse a entrar.

Seis brazos lo reciben en un abrazo que detiene el mundo, el tiempo, todo. Sus ojos húmedos buscan refugio en los de Guillermo que sonríe y con su mano despeja su frente, seca las lagrimas, borra el pasado, acaba las dudas, hasta lograr que sonría. Quiere empezar a explicar – shhh… después, después – los dedos sobre sus labios para callarlo, los besa apenas.

- Veni, que el asado ya está listo y vino medio mundo

Beto, le alcanza una copa de vino y Laura corre a abrazarlo – no sé cómo voy a agradecerte todo lo que haces por nosotros prima-

- No seas tonto, no hay nada que agradecer

- Diego, Brisa, porque no traen los dibujos que hicieron para papi? – todavía le resulta extraño a Guillermo pronunciar esas palabras.

“Nubes, sol, pasto, la típica casita con el típico árbol al lado, dos hombres agarrados de la mano, de la mano de uno de ellos un nene, de la mano del otro una nena. Una familia.”

“Nuestros chicos, nuestra familia, nuestra vida, nuestra manera de vivirla”

Proximo capitulo: http://actosdefeylibertad.blogspot.com.ar/2014/01/hosteria-5ta-parte-by-elena.html